El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Su rostro es familiar, como si se tratara de una antigua conocida. Gwendolyn se sienta y muestra una gran sonrisa; de entre sus cosas saca un periódico capitalino en donde aparece su foto. La entrevistaron hace un par de años, es que es actriz, también canta y baila.
Al leer la breve reseña publicada en el rotativo, destacan los estudios de esta lagunera de 30 años de edad: egresó del Centro de Educación Artística de Televisa, luego siguió en el Centro Universitario de Teatro (CUT), posteriormente se fue a Los Ángeles a tomar clases de actuación entre otras asignaturas.
Ya son 15 años de vivir dedicada al arte. Siendo apenas una adolescente decidió irse a la capital de país a probar suerte en el medio artístico. Dentro de lo que cabe, las cosas fueron fáciles para ella, su hermano Carlos Amador ?también actor- tenía exclusividad con Televisa y la contactó con sus conocidos para que ella también ingresara a la familia artística de Emilio Azcárraga. ?Duré ocho años con exclusividad, trabajara o no, me daban mi chequecito?, dice.
Algunos de los trabajos que realizó en la empresa de San Ángel fueron las telenovelas Agujetas de Color de Rosa y Prisionera de Amor; sus papeles no eran los principales, pero como quiera, le estaba sirviendo para darse a conocer.
Hace mucho tiempo de eso, ahora sólo recuerda esas épocas con cariño. De 2000 a la fecha ha estado trabajando con Tv Azteca y con Telemundo, ya no tiene exclusividad con nadie y eso le agrada, pues de esa manera puede trabajar con todo aquel que le interese.
?En Azteca salí en El País de las Mujeres, Un Nuevo Amor y recientemente en La Heredera, lamentablemente por tantos cambios que ha tenido la historia sacaron mi personaje, era la adivina que le decía todo lo que le iba a suceder al malo... también me han estado pidiendo mucho que salga en Lo que Callamos las Mujeres y La Vida es una Canción, así que no dudo que ya alguna vez me hayan (la gente) visto?, cuenta.
Gwendolyn Amador Padilla, hija de la poetisa lagunera Graciela Padilla, asegura que en estos tiempos lo que se necesita para destacar es el ambiente de la farándula es hacer un escándalo o ser hija de alguien importante.
?Yo soy de la misma generación de Araceli Arámbula, Yadira Carrillo, Arleth Terán y Susana González; ellas ya son muy conocidas y han tenido sus protagónicos pero la verdad cuando salimos yo estaba más clavada en el arte y en el estudio, yo no buscaba tanto salir en televisión como ellas, pero creo que ya llegó el tiempo?, dice.
Actualmente, Gwendolyn se encuentra tomando un taller de perfeccionamiento actoral en la escuela de Luis Felipe tovar, ?es como un entrenamiento, pues al igual que los atletas, nosotros los actores también tenemos que seguir entrenando para mantener el ritmo?; pero también está promocionando las dos últimas películas en las que participó, ambas con el papel estelar.
?Fueron realizadas por Felipe Pérez, de La Raza Films. Van dirigidas digamos a los braceros, a todos nuestros paisanos que se fueron a Estados Unidos. Se llaman La Vieja de mi Viejo y Perdone Ñora, las dos saldrán en video y quizá las vayan a pasar en televisión. El próximo tres de noviembre me voy a Los Ángeles a promocionarlas?.
Gwendolyn estuvo algunos días en la ciudad para visitar a su familia, pero en estos momentos ya se encuentra en el Distrito Federal ?picando piedra? como el primer día.
?En todo este tiempo no me he quedado con ganas de nada, creo que hasta he conseguido un poquito más de lo que esperaba... soy feliz con lo que hago, bueno creo que la felicidad no existe, pero sí las ganas de vivir?.
Cuestión de vocación
La joven lagunera eligió la actuación no tanto por la belleza y el glamour, ?sino por presentar la problemática social y la crisis que vive el mundo a través de las historias, digamos que por la función social de la actuación?.
-Ha participado en diez películas.
-En Telemundo trabajó en la serie Historias y Testigos y en la novela Gitanos.
-Fue imagen de Banamex de 1997 a 2000.
-Además de actuar, hace muchos jingles para radio.
-Antes de irse a la ciudad de México Gwendolyn estudió tres años en la región con Rogelio Luévano y Socorro Ruelas. También estudió ópera con la profesora Victoria Chapa.
-Uno de sus deseos es participar en películas de 36 mm. ?Quisiera trabajar con Alfonso Rosa Pliego, el que hizo lo de Niurka. Él hace cosas interesantes?.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreòn.