México, DF.- El 22 de febrero finaliza una serie que deja una gran huella en la historia de la televisión y en la memoria de los espectadores Sex and the City: el testimonio de cuatro mujeres del siglo XXI, con quienes durante seis años nos relacionamos emocionalmente y las acompañamos en sus alegrías y tristezas.
En Latinoamérica, apenas es el principio del fin, la señal Cinecanal transmitió ayer a las 19:00 horas el primer capítulo de la sexta y última temporada. Originada por las columnas publicadas por Candace Bushnell en el New Yorker Observer durante la década de los 90, el productor y creador de Melrose Place y Beverly Hills 90210, Darren Star, admiró sus ideas y las aterrizó en una serie de televisión pensada para la cadena HBO.
El y el escritor Michael Patrick King fueron dando forma a cada una de las cuatro protagonistas: Carrie Bradshaw, Miranda Hobbes, Samantha Jones y Charlotte York, definiendo claramente su personalidad para crear afinidad hacia el público femenino.
La actriz de Broadway Sarah Jessica Parker fue inyectando en Carrie una personalidad que la gente encontró atrayente, a pesar de sus múltiples defectos, los que sólo la hacían más humana y real para quienes la toman como un modelo a seguir.
En Samantha nos dimos cuenta que no importa si se tiene 40 o 45, una mujer puede ser tan libre en su sexualidad como en su juventud. Con Miranda admiramos la fortaleza de una mujer independiente, moderna y prejuiciosa como muchas que habitan las grandes urbes y Charlotte ?la eterna enamorada? nos mostró que el amor verdadero no sólo llega una vez y que está afuera esperando por nosotros.
Nueva York no sólo era el escenario de estas mujeres, sino era el alma del programa, ?la quinta chica?, a quien también maltrataban y analizaban. Dentro de esta ciudad todas perdían hombres, nunca resultaban triunfadoras en cuestiones del corazón. Sus quejas siempre eran dirigidas hacia la sociedad que las presionaba por ser solteras, rebasar los 30 años, y aún así disfrutar la vida, pieza fundamental en su éxito, pues muchas se sienten identificadas con estas situaciones.
Con ellas buscamos un consuelo en cuestiones del corazón o simplemente una distracción a nuestras rupturas, pues el melodrama nunca falla en sus historias, así como eufóricas risas y dosis de melancolía, evidente en la recta final de este cuarteto, en donde por fin, una por una va sentando cabeza y cerrando sus ciclos.
Durante la sexta temporada veremos habrá sorpresas, como el segundo matrimonio de Charlotte, el primero de Miranda, el nuevo novio ruso de Carrie interpretado por el bailarín Mikhail Baryshnikov, el joven hombre en la vida de Samantha, así como su confrontación a una dura enfermedad.
Aunque se ha especulado bastante acerca de lo que sucederá en el capítulo final, se sabe que la mayor parte se rodó en París en donde se vio al actor que personifica a Mr. Big, Chris Noth, rondando los sets, por lo que no se sabe si el destino lo volverá unir con Carrie para siempre.
