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BUENOS AIRES, ARG.- El príncipe Harry de Inglaterra llegó el pasado viernes a Argentina, para trabajar durante un mes en una estancia de polo y alejarse así de la serie de escándalos en los que se ha visto envuelto en su país.
El hijo menor del príncipe Carlos, heredero del trono, y de la fallecida Diana llegó a bordo de un vuelo comercial que aterrizó en el Aeropuerto de Ezeiza a las 09:38 horas locales.
Harry permaneció en una sala VIP de la estación aérea y después de que el personal de la Fuerza Aérea le realizó los trámites para ingresar al país, abandonó el aeropuerto a bordo de un vehículo que lo estaba esperando en la pista.
De acuerdo con la embajada británica, el príncipe de 19 años descansará en el país y se perfeccionará en la técnica del polo, antes de comenzar su educación en la escuela militar de Sandhurst.
La llegada del príncipe viene precedida de una serie de escándalos, el último de ellos una pelea que tuvo con un fotógrafo del periódico Evening Standard a la salida de un club nocturno y que fue la comidilla de los medios.
Antes de su viaje, voceros de Palacio reconocieron que este viaje llevaba algún tiempo en la agenda y se adelantó para permitir que Harry escapara al escrutinio público.
