EL SIGLO DE TORREÓN
FRANCISCO I. MADERO, COAH.- Para destituir al comandante de bomberos, Gilberto Lozoya Guerrero, los miembros del patronato le entregaron un acta donde se le indica que por acuerdo de Cabildo se le baja de nivel y debe acatar las órdenes del nuevo al mando, Andrés Martínez.
Sin embargo, ocho de los 15 regidores acordaron que esto no fue lo que se dijo en la sesión de Cabildo, sino que se ofrecería la oportunidad a ambas partes para dialogar sobre sus inconformidades, tanto al patronato como al propio Lozoya Guerrero, para que expusieran sus argumentos.
En los asuntos generales de la sesión, se leyó a los funcionarios la petición del patronato para remover de su cargo al comandante, porque bajo su mando se descompuso una motobomba, además de que los vehículos tenían bajos los niveles de aceite y no acataba las órdenes de Héctor Güereca Robles, presidente de esta asociación.
El primer regidor, Federico García Márquez, dijo que el oficio era muy personal y no contenía argumentos válidos para la remoción del apagafuegos. No obstante, el bombero recibió un acta donde se le dijo que fue decisión del Cabildo.
Lozoya Guerrero cuenta con oficios dirigidos tanto al presidente del patronato como al director de Seguridad Pública, Fernando Maldonado Díaz, donde expone las situaciones mencionadas. Desde mayo del año en curso, el comandante reportó que los niveles de aceite de los vehículos eran bajos y solicitó que se le proporcionara lo necesario para su mantenimiento, sin que se atendiera su petición.
También explicó que una motobomba presentó desperfectos luego que fue utilizada por Cristóbal Marrufo López, hijo del alcalde, José Luis Marrufo Álvarez, para regar un campo de futbol ubicado en el interior de la planta despepitadora Gustavo Díaz Ordaz, propiedad del Edil, actividad realizada con la autorización del patronato.
Los regidores esperan dialogar el lunes sobre esta situación irregular con el Presidente Municipal, pues de momento el Edil se encuentra de vacaciones fuera del municipio. Ésta sería la cuarta ocasión en que el patronato dirigido por Héctor Güereca intenta destituir a Lozoya Guerrero.
La causa
En el primer día de trabajo de Andrés Martínez como nuevo comandante de los bomberos, se volteó una pipa cuando salía del cuartel, porque no estaba colocado uno de los seguros, según comentaron los apagafuegos.
Martínez pertenece al escuadrón de Irritilas y se llevó a parte de “su gente” como apoyo a la estación, lo que ha suscitado enfrentamientos entre este grupo y los bomberos tanto de base como voluntarios. Ambas partes se culpan entre sí por el accidente, pero hasta el momento se desconoce a los culpables.