París, (EFE).- La sonda europea Huygens a bordo de la nave espacial Cassini, que emprendieron hace siete años un viaje de la Tierra a Saturno, se separarán el día de Navidad, informó la Agencia Espacial Europea (ESA).
La separación de Huygens y Cassini está prevista el 25 de diciembre en torno a las 4.08 GMT, pero no se dispondrá de información sobre el resultado de la operación hasta que la nave espacial pueda apuntar su antena hacia la Tierra.
Tras su liberación, la sonda Huygens, que va adosada a un lateral de Cassini, se alejará a una velocidad de unos 35 centímetros por segundo girando sobre ella misma unas siete veces por minuto, con el fin de mantener su trayectoria balística.
Los dos vehículos espaciales no recuperarán la comunicación entre ellos hasta que Huygens abra su paracaídas principal al entrar en la atmósfera de Titán, el principal satélite de Saturno, y de un tamaño superior que los planetas Mercurio o Plutón.
El 28 de diciembre, está previsto que Cassini maniobre para abandonar su trayectoria de colisión con Titan, en la que debe situarse para lanzar a Cassini, y recuperará su misión principal: explorar Saturno y sus anillos durante al menos cuatro años.
Cassini recibirá asimismo los datos trasmitidos por Huygens, que grabará, para enviar más tarde a la Tierra.
La misión espacial europea-estadounidense Cassini/Huygens, lanzada en octubre de 1997, se encuentra en la órbita del planeta Saturno desde el pasado 1 de julio.
Está previsto que Cassini aterrice el próximo 14 de enero en la luna Titán, situada a 1,250 millones de kilómetros de la Tierra.
La sonda se convertirá así en el primer vehículo espacial en explorar "in situ" la atmósfera de "la más misteriosa de las lunas de Saturno", "cuya composición química parece muy similar a la de la Tierra primitiva, justo antes de que la vida apareciese hace 3 mil 800 millones de años", destacó la ESA.
La misión Cassini-Huygens es un proyecto común entre la agencia espacial norteamericana NASA, la ESA y la Agencia Espacial Italiana (ASI) que fue lanzada al espacio el 15 de octubre de 1997.
Han hecho falta siete años de vuelo y varias maniobras de asistencia gravitatoria efectuadas sobrevolando Venus, la Tierra y Júpiter para alcanzar el objetivo.
El primer control de vuelo lejano de Titán por Huygens y su nave nodriza Cassini tuvo lugar el 2 y 3 de julio pasado, mientras que el último se efectuó el 26 de octubre, a 1.174 kilómetros de distancia.
Todas las informaciones recogidas durante esos vuelos, así como las que se obtendrán el próximo día 13, a una altitud de 1.200 kilómetros, servirá para validar las condiciones de entrada en la atmósfera de Titán de Huygens, según la ESA.
Cuatro días después, el 17 de diciembre, la nave se pondrá en una trayectoria controlada de colisión con Titán, que le permitirá soltar a Huygens y ponerla en la ruta correcta hacía el satélite, apenas una semana antes de su separación definitiva.
Huygens permanecerá dormida hasta algunas horas antes de su llegada a la atmósfera de Titán, el 14 de enero, a las 10.15 GMT.
Tardará unas dos horas y 15 minutos en completar su descenso, durante las que enviará información a Cassini.
Esos datos viajarán más tarde a la Tierra en un viaje interplanetario efectuado a la velocidad de la luz y que durará unos 67 minutos.