Declina el Gobierno estadounidense responder sobre casos de torturas en Irak
SUN-AEE
WASHINGTON, EU.- El Gobierno y Congreso de Estados Unidos han abdicado a su responsabilidad de responder a los casos documentados de tortura y asesinato de prisioneros extranjeros por parte de militares estadounidenses, informó The Washington Post.
En su editorial ?Crímenes de guerra?, no se refiere directamente a esos crímenes, pero indica que las fuerzas militares bajo el mando del presidente George W. Bush, ignoraron las leyes y los tratados internacionales en la guerra contra el terrorismo.
?Funcionarios militares perdían los archivos, no realizaban autopsias después de la muerte de los sospechosos y permitieron que se alteraran las pruebas?, indicó el Post.
Añadió que una de las causas por las que no se ejecutaron esas acciones fue porque la máquina copiadora en el centro médico estaba descompuesta. ?A los soldados que se encontraba que habían cometido crímenes de guerra se les excusaba con castigos no criminales?, puntualizó.
Apuntó que el Gobierno estadounidense rehusó divulgar esos documentos bajo la Ley de Libertad de Información, y un juez se lo obligó, y ahora ha respondido con ?promesas blandas? de voceros de que se investigarán las alegaciones.
Pero el Gobierno ha demostrado que no planea llevar a la justicia a ningún alto funcionario ni cambiar sus políticas y por su parte, ya han pasado cuatro meses desde que se realizó una audiencia en el Congreso sobre el abuso de prisioneros.
El diario indicó que quizás la intervención de las cortes ayuden a esclarecer ?las violaciones a los derechos humanos que están ocurriendo en Guantánamo, Irak y Afganistán?.
?Gracias a una demanda de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) y otros grupos de derechos humanos, miles de páginas de documentos del Gobierno divulgados este mes han confirmado verdades dolorosas sobre el abuso de detenidos extranjeros y la CIA?.
Esas son verdades que ?la administración Bush implacablemente ha rehusado aceptar?, apuntó.
Señaló que los nuevos documentos establecen como falsas ?sobre cualquier duda? las afirmaciones del secretario de Defensa, Donald Rumsfeld y otros funcionarios quienes han culpado de las torturas a prisioneros iraquíes en Abu Ghraib a reservistas de bajo rango.
Señaló como falsas las afirmaciones de que esos abusos ocurrieron en los cambios de guardia nocturnos en unos cuantos meses de 2003, que no estaban relacionadas con los interrogatorios y que no ocurrieron torturas en Guantánamo.
?Los documentos muestran que el abuso de prisioneros ya estaba ocurriendo en Guantánamo en 2002 y continuó en Irak incluso después de las protestas por las fotografías de Abu Ghraib?, informó el Post.
