INICIAN TRÁMITES PARA ESTABLECER CLÍNICA EN SAN PEDRO DE LAS COLONIAS
Investigadora torreonense realiza con éxito un tratamiento contra las adicciones
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Para quienes son escépticos en cuanto a la cura de adicciones, la doctora lagunera Emilia Figueroa Guillén ha demostrado que la metadona es una alternativa para mantenerse ?limpio? de heroína.
Como ?nadie es profeta en su tierra?, pocos saben que la especialista nacida en Torreón logró implementar un sistema anti-heroína, basado en este medicamento y complementado con un tratamiento psicológico y psiquiátrico en las 11 clínicas que maneja alrededor del país.
Luego de más de 15 años de no pisar La Laguna, Emilia regresó para poner en marcha la primera de estas clínicas en Coahuila, que aproximadamente dentro de tres meses iniciará funciones en San Pedro de las Colonias.
?No sabía que en una ciudad tan pequeña como San Pedro existiera una incidencia tan grande de adictos a la heroína, y si he llevado una esperanza a otras partes del país, porqué no a mi gente?.
Su método consiste en aplicar una dosis diaria de metadona por espacio de 90 días, tiempo durante el cual el paciente recibe terapia psicológica según lo requiera y al mismo tiempo tratamiento psiquiátrico.
Aunque la metadona también es una droga, la doctora aclara que es un medicamento noble sin ninguna reacción secundaria, y lo ha comprobado en años y años de estudio, hasta lograr que la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo recomiende como un tratamiento eficaz contra la heroína.
?Es un narcótico sintético que tiene las mismas propiedades de la heroína, pero despontecializado como droga; se usa como analgésico en pacientes terminales de cáncer para aliviar su dolor, es por eso que combate el síndrome de abstinencia de heroína, uno de los más severos en sus reacciones?.
Según explica la especialista, a los 30 minutos de que se ingiere desaparecen los efectos secundarios producidos por la ansiedad de consumir heroína, como son el lagrimeo, escalofríos, vómito, diarrea y demás.
La trascendencia de su trabajo no sólo radica en los resultados que se obtienen en el tratamiento de estos pacientes, sino en el hecho de que las investigaciones fueron realizadas en México y comandadas por una mexicana. Por su propia cuenta empezó con los estudios y, por su propia cuenta también, arrancó cada una de sus clínicas.
En cuanto a los costos, Figueroa Guillén señala que cada dosis diaria se aplica por la cantidad de 50 pesos, en un tratamiento que dura mínimo 90 días y máximo dos años. ?A medida que empiezan a ?limpiarse? de la droga, el paciente recupera su vida y consigue un trabajo, con lo que puede pagar su medicamento?.
Hay quienes están en contra del uso de la metadona, asegura la doctora, porque a final de cuentas es una droga, ?pero es un tratamiento integrado en medicina física, psicológica y psiquiátrica, que va a mantener al paciente bajo control?.
Ahora, contra la cocaína
Su trabajo ha trascendido fronteras, ya que también en Estados Unidos tiene una clínica y sus resultados han sido aprobados por las autoridades de salud del país vecino. El American Journal de medicina ya publicó esta primera investigación, pero la lagunera ya trabaja en una segunda.
Desde Mexicali, en donde radica, Emilia dirige un nuevo estudio para combatir la adicción a la cocaína y otras drogas como el éxtasis, ahora apoyada por especialistas de la Universidad de Nueva York, quienes al conocer su trabajo no dudaron en colaborar con ella.
?Estoy hablando de un antiepiléptico infantil que estos doctores tenían diez años estudiando, pero sólo lo habían probado en ratas y primates, mientras que yo ya lo había aplicado en pacientes con grandes resultados?.
Y es que los médicos estadounidenses son cautelosos al realizar investigaciones en seres humanos, porque la administración de drogas es muy delicada y además, las demandas judiciales están a la orden del día.
Están a la espera de que se publique en el American Journal de psiquiatría y en el New England de medicina, lo que les abriría las puertas para empezar a aplicar el tratamiento en las clínicas de rehabilitación.
Su meta es lograr que el círculo de rehabilitación se cierre, al trabajar conjuntamente con el sistema judicial del país, como ya se hace en Estados Unidos. ?Que de verdad las autoridades nos ayuden a tener bajo control a los pacientes, porque sería una forma de ayudarnos mutuamente y que repercutiría directamente en una mejor sociedad?.
Cabe aclarar que la metadona es un medicamento controlado, que no se puede conseguir fácilmente, por lo que si alguien está interesado en llevar este tratamiento, puede ponerse en contacto con Emilia Figueroa Guillén en efg_92243@yahoo.com.