Un equipo rápido y espectacular tendrán los aficionados laguneros en la naciente temporada 2004 de la LNBP.
Torreón, Coah. Con el pie derecho arrancaron los Algodoneros de la Comarca la temporada 2004 de la Liga Nacional de Baloncesto Profesional, triunfo contundente sobre Leñadores de Durango, equipo afectado por la ausencia de su coach, Marcelo Richotti, así como de sus tres refuerzos extranjeros, quienes se unieron al equipo prácticamente antes de viajar a Torreón.
Un sello espectacular tiene el equipo dirigido por Óscar Murillo, en donde destaca la velocidad de sus integrantes, a excepción de Ken Leeks, el refuerzo importado que menos enseñó, tanto en el juego ante la Selección Nacional como frente a Leñadores de Durango. En contraparte, Issac Gildea y Robert Day han tenido un comienzo tan espectacular como efectivo, el cual los convierte ya en una pareja muy temible para cualquier defensiva, por la capacidad de ambos para igual hacer tiros de tres puntos, que anotaciones de dos, con coladas hasta abajo del tablero.
Muy diferente se ve a Jorge Serrano, más hecho como jugador que en su primera aventura con Algodoneros, cuando además lucía algunos kilos de sobra, los cuales al desaparecer lo convierten en uno de gran movilidad, algo muy necesario ahora que se le utiliza como el movedor del equipo, por la ausencia de un elemento con las características para ser el “uno”.
Erik Hare y Arturo “Loco” Velazco lucen como buenas opciones para la posición de “cuatro” y Freddy Arcovedo se la tendrá que rifar como el poste bajo “cinco” cuando se tenga la ausencia obligada de Ken Leeks. Hoy Algodoneros de la Comarca tiene un cuadro base muy confiable, con tres cambios; Arturo Velazco, Freddy Arcovedo y Óscar Yander, aunque los dos últimos, de acuerdo a lo señalado por la directiva, serán operados de la rodilla y podrían perder un número importante de partidos.
Afortunadamente el calendario puso como rivales a los Leñadores de Durango en el arranque de la temporada, porque el equipo de la Perla del Guadiana no realizó un adecuado entrenamiento, lo que facilitó el triunfo contundente de Algodoneros, sin quitar mérito a la quinteta de Óscar Murillo, que sí deberá trabajar en la corrección de algunos aspectos.
El sistema ofensivo utilizado por Óscar Murillo es elemental, pero muy efectivo cuando se tiene a tiradores de la talla de Issac Gildea, Robert Day, Jorge Serrano y Erik Hare; en la primera circulación de la pelota, la opción para el lanzamiento de tres puntos se abre con Gildea o Day desde las esquinas; una más se presenta desde la llave con Jorge Serrano; la cuarta en el centro con Erik Hare y todavía la última abajo del tablero con Ken Leeks.
El método se hace muy versátil por el buen tiro de media distancia en los casos de Erik Hare y Arturo Velazco, pero se notan problemas con Ken Leeks, que abajo del tablero debe aprovechar su tonelaje y estatura, para hacer trabajar defensivamente a los postes rivales y con esto limitarlos en su productividad ofensiva.
Mientras Óscar Yander esté listo para entrar en acción, el coach Murillo tendrá un mejor panorama, con la posibilidad de mover a Jorge Serrano como “dos” o “tres” posiciones que domina ampliamente, para dar descanso a Issac Gildea y Robert Day. Para lo que se ofrezca como “cuatro” o poste alto, ahí está “El Loco” Velazco, que al parecer ahora sí viene decidido a ser parte importante en las aspiraciones del equipo. El de Hermosillo tiene todo para destacar y sólo basta que haga las cosas con seriedad y se olvide del entorno que existe fuera de la cancha, para concentrarse en el rectángulo.
Muy bien Freddy Arcovedo, poste de gran fortaleza que permitió a Óscar Murillo prescindir de Ken Leeks, el moreno que tiene cualidades y a quien sólo falta soltarse para ser ese “cinco” que requiere todo equipo aspirante al éxito.
Hay mucho por mejorar en el trabajo defensivo, específicamente cuando el rival recupera el rebote ofensivo y se arma el rompimiento rápido; ahí debe haber siempre un elemento listo para compensar, porque por esa vía los equipos rivales pueden tener acceso a anotar bastantes puntos. Ninguna de las carencias que se vieron en el debut ante Leñadores de Durango son imposibles de dominarse y lo único que se requiere es trabajarlas durante el entrenamiento, porque indudablemente cada uno de los integrantes del equipo sabe ejecutar los fundamentos del basquetbol sobre la cancha.
Como espectáculo un diez a los Algodoneros de la Comarca en su juego inaugural frente a Durango; el basquetbol vertical, rápido y ofensivo que desplegaron en la duela fue del agrado de los asistentes, algunos de los cuales ya preguntan cuándo es el próximo partido en casa. Para redondear la quinteta se requiere un movedor y que el moreno Ken Leeks juegue con agresividad abajo de los tableros, al fin de cuentas tiene con qué hacerlo.