LA HABANA, feb 24 (Reuters) - Aficionados ricos y distribuidores llegaron esta semana a la Meca del tabaco para cinco días de seminarios y visitas a las plantaciones y fábricas donde se "tuercen" los puros más famosos del mundo.
El VI Festival del Habano fue inaugurado con salsa, bailes de cabaret y fuegos artificiales y será clausurado en la noche del viernes con una cena de gala en la que se subastarán por miles de dólares humidores firmados por el presidente Fidel Castro.
Otro de los puntos fuertes del programa de este año será la cena en homenaje a un famoso fumador de habanos, el primer ministro británico Winston Churchill, en el 130 aniversario de su nacimiento. A la cena asistirá su bisnieta Jenny Repard.
Para los conocedores el festival ofrece la oportunidad de seguir de cerca la marcha de la producción y de la cosecha, además de poder disfrutar de los placeres de un buen habano y de la noche habanera.
Y para muchos aficionados el festival es la oportunidad de hacer acopio de sus habanos favoritos.
Los asistentes al Festival visitaron algunas fábricas de La Habana donde se torcían a mano los famosos Cohiba y Montecristo bajo posters de Ernesto Che Guevara y otros líderes revolucionarios.
Upmann, abierta este año en un edificio remodelado donde antes se fabricaban cigarrillos.
Para celebrar el 160 aniversario de esta legendaria marca por dos banqueros alemanes, los hermanos Upmann, se puso a la venta un humidor especial por 1.600 dólares.
En esta edición del Festival se rendirá homenaje a la marca San Cristobal de La Habana, creada hace cinco años, y se analizará también la vinculación entre los habanos y el cine.
Pero sobre todo se fumarán muchos habanos de los casi 300 tipos que comercializa la Corporación Habanos, una empresa mixta cubano-hispano-francesa que organiza el Festival.
