Las bajas temperaturas regidtradas en los últimos días obligan a indigentes a buscar refugio
Cerca de 60 ingresos ha registrado el Albergue Municipal en lo que va de diciembre, sobre todo a consecuencia de las bajas temperaturas que se reportan en la ciudad de Durango, según datos de la Dirección del Programa de Atención a Menores y Adultos en Riesgo (PAMAR).
El archivo de ingresos de diciembre, cubierto de cartón de fólder amarillo como el expediente de cada mes, en la época navideña encierra decenas de historias llenas de la cruda realidad que rodea a los indigentes.
Es domingo por la mañana. La Nochebuena ya transcurrió, la Navidad también se fue, y con ella la especial cena que en el albergue para indigentes preparó la señora Marta Camacho, quien hace de todo en ese lugar: limpia, barre, tiende camas, prepara desayuno, comida y cena... de todo.
Aunque ella sí tiene a su familia que se reunió en la cena de Nochebuena en casa de su mamá, la señora Marta tuvo que compartir la importante convivencia en la que se recuerda al Niño Jesús junto con Abel González y Maricela Campos Rodríguez, de 51 y 13 años de edad, respectivamente.
También intercambió la misma experiencia con la agente preventiva Graciela Carrillo, y con el encargado del velatorio PAMAR, Esteban Robles. Y es que unos por necesidad, otros por obligación, casi nadie por gusto pero tuvieron que celebrar el nacimiento del Niño Dios dentro de las paredes del albergue.
En el caso de la joven adolescente Maricela Campos, su estancia en el albergue ya es de casi todos los días. Ahí almuerza, come y cena. No tiene alguien que la reciba, que la espere en casa.
?La muchachita tiene a sus papás que viven en un poblado de aquí cerca, pero ella les dice a los de Trabajo Social que no regresará a su hogar porque su papá la manosea y le quiere hacer cosas?, explica la agente Graciela, comisionada para dar seguridad al albergue ubicado en bulevar Dolores del Río, rumbo al legendario Puente Negro.
Con dificultades porque Maricela es hosca y desconfiada con casi toda la gente, la mujer policía ha ido conociendo cada vez más a esta adolescente, ya que sus ingresos al PAMAR datan de hace tiempo.
?Pero, cuando no se le pega la gana ir al albergue, la niña que convive desde hace años con la vagancia prefiere dormir en la Camionera, en el Hospital General o en las calles del centro de la ciudad?, añadió.
En la Nochebuena no la pensó dos veces. Maricela decidió convivir con su nueva familia, compuesta por el personal y los esporádicos visitantes y huéspedes del Albergue Municipal.
?Es que ahora sí le está calando el frío, por eso regresa todos los días a ocupar su lugar?, agrega la agente policiaca.
Y no era para menos el decidirse por el albergue como alternativa para la importante cena de Navidad. La señora Marta Camacho, con nueve años trabajando en ese sitio auspiciado por el Ayuntamiento capitalino, preparó platillos de alta cocina para agasajar a los indigentes que desearan cubrirse del frío en el albergue.
?Mire, preparé pierna mechada con aderezo de ciruela pasa, espagueti frío con piña y nuez, pavo y ensalada verde, ¿cómo ve??, dice muy orgullosa de sí la empleada del lugar, a quien su turno se le acabó casi en los primeros minutos del 25 de diciembre, y de inmediato se dirigió a donde la esperaba su familia con la fiesta ya iniciada.
Así se festejó la Navidad en el Albergue Municipal. Aunque hubo huéspedes que por el frío con el que llegaron decidieron no salir de su cuarto ni para compartir la cena de Nochebuena con el resto de los indigentes.
INDIGENTES
Diciembre gélido
La vagancia es el principal factor entre las personas, adultos, jóvenes y niños que ingresan al Albergue PAMAR. A continuación la lista de los ingresos que ha tenido esta posada en lo que va del mes.
Día/ Ingresos
3 6
5 1
6 4
7 2
8 4
9 4
10 2
11 1
13 3
14 3
15 4
16 1
19 1
20 2
21 5
22 3
23 2
24 3
FUENTE: Archivo de la Dirección del Albergue Municipal.