El presidente español, José Rodríguez Zapatero, bajo fuertes aplausos de los mandatarios, dio el discurso inaugural.
28 de mayo 2004.
Guadalajara (EFE).- América Latina, el Caribe y la Unión Europea (UE) comenzaron hoy en Guadalajara, una cumbre que buscará definir consensos en torno a la defensa del multilateralismo y a favor de la cohesión social.
El presidente español, José Rodríguez Zapatero, bajo fuertes aplausos de los mandatarios y representantes de 58 países, dio el discurso inaugural de la reunión.
Rodríguez Zapatero animó este viernes al resto de líderes participantes en la cumbre de Guadalajara a promover con un enfoque común un mundo más justo, solidario, en paz y con respeto a los derechos humanos, como ansía la población de la UE y Latinoamérica.
El presidente del gobierno de España, que inauguró las intervenciones de la III Cumbre UE-América Latina y Caribe como representante del país que albergó la anterior cita, se mostró convencido de que la Declaración de Guadalajara permitirá consolidar "puntos de vista coincidentes" sobre multitud de materias y reanudar el diálogo sobre el multilateralismo efectivo y la cohesión social.
El jefe del Ejecutivo español subrayó que estas cuestiones constituyen "dos de los temas más sensibles de la actualidad internacional" y se mostró convencido de que la cumbre de Guadalajara probará la "identidad de valores y visiones" entre "las dos mitades de un mismo mundo occidental".
Tras recalcar que la UE comparte con Latinoamérica y el Caribe un "sustrato común", Zapatero abogó por abordar conjuntamente cuestiones como la reforma de la ONU, el respeto universal de los derechos humanos, el desarrollo sostenible, la eliminación de la corrupción, el narcotráfico y la criminalidad organizada, la erradicación de la pobreza o la lucha contra el terrorismo.
"Debemos seguir aprovechando este enfoque común en muchos de los temas fundamentales de la agenda internacional para tratar de aportar nuestra contribución conjunta a su solución", insistió al respecto.
Y destacó que "España está plenamente convencida de la necesidad de estas cumbres y firmemente comprometida con este mecanismo privilegiado de diálogo político birregional".
"El enfoque eminentemente político de las cumbres nos permite, en fin, tratar nuestros problemas desde una óptica global, de manera franca y directa", añadió Zapatero.
A continuación, el presidente del Gobierno español recordó cómo la primera de estas cumbres, celebrada en Rio en 1999, estableció "un nuevo marco global desde el que entablar un diálogo privilegiado al más alto nivel".
Y la segunda cita, que tuvo lugar en Madrid en 2002, relanzó las relaciones birregionales y fijó "una agenda renovada entre Europa y América Latina y Caribe".
Hoy, en Guadalajara, los líderes de ambas regiones están "cimentando un proceso único" en el que se encuentran comprometidos 58 países en representación de más de mil millones de personas, "que ansían un mundo más justo, más solidario, una vocación permanente por la paz y por la defensa de los derechos humanos", afirmó Rodríguez Zapatero.
En su intervención, el jefe del Ejecutivo español felicitó asimismo al presidente mexicano, Vicente Fox, por la "excelente organización" de un encuentro que, según destacó, es "el más numerosos de los celebrados hasta ahora entre la UE y los países de América Latina y el Caribe".
