Los soldados serán reubicados para continuar con la búsqueda de armas bajo la frontera de Egipto.
21 de mayo 2004.
RAFAH, Gaza (Reuters).- Israel inició el viernes un repliegue parcial de las tropas instaladas en un campo de refugiados de Gaza, tres días después de haber iniciado una violenta ofensiva.
Estados Unidos había presionado a Israel para que abandonara el campo de refugiados de Rafah, tras tres días de operaciones sangrientas en las que murieron 40 palestinos y docenas de casas fueron demolidas.
En Washington, un alto funcionario del Departamento de Estado dijo que el viceprimer ministro Ehud Olmert había asegurado a Estados Unidos que las tropas no destruirían más casas.
Informaciones procedentes del ejército israelí confirmaron que los soldados estaban siendo reubicados luego de la operación en el campamento, pero que continuarían las acciones de búsqueda de túneles para el contrabando de armas bajo la frontera con Egipto.
El ejército indicó sin embargo que no han sido encontrados túneles y que hasta ahora solamente ha sido detenido un palestino,
luego de que fueron interrogados cientos. Fuentes de seguridad consideran que la mayor parte de los buscados huyeron antes de la invasión.
Funcionarios municipales dijeron que al menos 43 casas fueron destruidas y decenas más dañadas tras el inicio de la ofensiva el
martes. Un total de 40 palestinos han muerto desde entonces, entre ellos elementos armados y manifestantes alcanzados por un proyectil disparado desde un tanque.
El ejército indicó que destruyó deliberadamente siete casas, entre ellas la de un militante del Yihad Islámico. Otros daños a residencias y caminos fueron causados por vehículos militares pesados y bombas colocadas por militantes, señaló.
Testigos palestinos dijeron que los tanques habían empezado a abandonar dos barrios de Rafah a primeras horas del viernes, pero los soldados seguían estando al mando del campo.
Fuerzas de seguridad israelíes dijeron que se mantendría un pequeño despliegue de tropas en el campo por tiempo indefinido.
Israel irrumpió en Rafah el martes en la más sangrienta incursión en Gaza en años, tras la pérdida de 13 soldados la pasada semana.
En las primeras horas del viernes, los soldados israelíes comenzaron a distribuir folletos en árabe advirtiendo a los residentes de Rafah contra la posibilidad de ayudar a activistas incluidos en una lista de buscados.
"Esta gente está saboteando sus vidas con su actividad terrorista", decían los folletos. Israel dice que la operación en Gaza es necesaria para destruir los túneles usados para pasar de contrabando armas y para frenar la actividad de activistas.
