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MÉXICO, DF.- El subsecretario de Gobernación, Armando Salinas Torre, confirmó que han habido amenazas y riesgos reales de actos terroristas involucrando a aeronaves mexicanas con destino a Estados Unidos.
Asimismo, advirtió que continuarán las medidas de seguridad "porque el riesgo que se corre es de proporciones inimaginables".
El funcionario dijo que cuando se ha detectado a un pasajero sospechoso en algún vuelo, se ha colocado a uno o varios agentes encubiertos de la Policía Federal Preventiva (PFP) en el mismo vuelo, incluso como sus compañeros de viaje, para realizar una "vigilancia superior".
Respecto a la cooperación con Estados Unidos para prevenir actos de terrorismo, Salinas Torre dijo que el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) no sólo intercambia información de inteligencia con el Buró Federal de Investigaciones (FBI), sino también con la Agencia Central de Inteligencia (CIA), de Estados Unidos.
Este tipo de colaboración, dijo, siempre ha existido con los gobiernos de Estados Unidos y de otros países, pero la diferencia es que actualmente se informa de ello a la opinión pública, aunque con las reservas que el caso exige.
En diversas declaraciones hechas ayer a noticiarios radiofónicos, el subsecretario de Población, Migración y Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación (SG) reconoció que la intensificación de las medidas de seguridad en los aeropuertos han provocado malestar entre los usuarios, pero señaló la importancia de hacer todo lo necesario para asegurar a los viajeros y aeronaves.
Salinas Torre explicó que las autoridades han tenido información sobre un probable riesgo a la seguridad de alguna aeronave, y en consecuencia se han aplicado las medidas de prevención conforme a la fase Tres del Nivel de Contingencia Aeroportuaria, que funciona de manera similar al "semáforo de alerta volcánica" del Popocatépetl, según las condiciones de riesgo para la población.
"Las amenazas y los riesgos han sido reales", de actos de violencia y de terrorismo, dijo Salinas Torre al referirse a la información de inteligencia intercambiada recientemente entre los gobiernos de México y Estados Unidos sobre la operación de aeronaves mexicanas.
Del mismo modo explicó que, cuando se han tenido elementos de sospecha o suspicacia sobre algún pasajero, pero sin contar con evidencia sólida, se ha actuado con mayor precaución, incluso colocando a agentes encubiertos compartiendo asiento en la aeronave.
