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MÉXICO, DF.- Las empresas no pueden seguir financiando los privilegios de un grupo equivalente a tres por ciento del total de los trabajadores afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), advirtió la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
En conferencia de prensa, José Luis Barraza, presidente del organismo, aseveró que se buscan todas las acciones legales al alcance para encontrar una solución al Régimen de Jubilaciones y Pensiones (RJP), pero la más viable y la cual no ha sido aceptada por el sindicato del Seguro Social, es incrementar a 65 años de edad la jubilación y establecer un nuevo esquema individual de retiro para los trabajadores en activo.
“Ya no podemos mantener una situación insostenible. Si no hay cambios, esto pone en peligro no sólo a la competitividad de las empresas, sino el crecimiento y la creación de empleos. El gremio debe decidir si está con el país o prefiere defender privilegios insostenibles a costa de las oportunidades del resto de la sociedad”, aseveró.
Los patrones del país no buscarán medidas coercitivas como no pagar sus cuotas para que el sindicato modifique su actitud, sino el diálogo y la negociación, explicó Barraza.
El 31 de marzo, la agrupación de trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social y la dirección deberán presentar una solución para propiciar un cambio al RJP, el cual otorgue en el mediano y largo plazos un alivio financiero al organismo.
Ante esto, los organismos del sector privado que forman parte del comité técnico tripartito del IMSS han sostenido reuniones con el secretario del Trabajo, Carlos Abascal, en busca de una solución, señaló.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Seguridad Social de la Coparmex, Javier Moreno, advirtió que si persiste la negativa de los trabajadores del IMSS, el costo financiero se disparará.
El IMSS paga actualmente 240 por ciento de sus ingresos por cada trabajador retirado. Ahora existe una relación de tres trabajadores en activo por un jubilado, lo que se podría agravarse en cinco años, afirmó.
Añadió que un jubilado debe hacerse acreedor a una pensión mínima digna, cuyo parámetro es 70 por ciento de su último ingreso como trabajador en activo, pero hoy en día éstos ganan más del doble, o por encima de un sindicalizado, lo cual fomenta el retiro a una corta edad.