03 de diciembre de 2004.
SAO PAULO, (AP).- Oficiales de la policía federal de todo el país se unieron ayer a funcionarios de Sao Paulo para tomar fotografías y huellas digitales a los ciudadanos de Estados Unidos que llegan a Brasil.
El juez federal Julier Sebastiao da Silva ordenó la medida el lunes en respuesta a una nueva regulación estadounidense contra el terrorismo, la cual requiere que los ciudadanos de 27 países, entre ellos Brasil, que entren a Estados Unidos sean fotografiados y se les tomen huellas dactilares.
Hasta ahora sólo la policía federal de Sao Paulo estaba preparada para cumplir con la orden, que entró en efecto el jueves. "Hubo una resolución para que cada unidad pudiera establecer cuánto tiempo necesitaba para implementar la orden del juez", expresó un oficial de prensa de la policía federal en Brasilia.
"Sao Paulo comenzó de inmediato porque tenían la gente y los equipos disponibles", explicó la fuente que declinó ser identificada. Unos 230 norteamericanos fueron sometidos el jueves a los nuevos procedimientos. No quedaba claro cuántos lo hicieron ayer.
Los estadounidenses que llegaban aquí eran separados de los ciudadanos de otros países para pintar con tinta los dedos de sus manos y tomarles fotografías. Sostenían una hoja de papel con un número que los identificaba.
"Me sentí un poquito extraño teniendo que sostener un número frente a mí mientras me tomaban una fotografía", expresó Larry Brant, un científico de 57 años que llegó desde Chicago.
Dijo que había leído sobre la medida en el diario antes de llegar, por lo que no lo sorprendió. "Mi única inquietud es si tendré que hacerlo cada vez que llegue. Hoy estuvo bien, había una hilera corta, pero no me puedo imaginar haciéndolo nuevamente", expresó Brant, que viaja frecuentemente a Brasil.
El volumen de pasajeros era inferior al de cualquier viernes debido a las festividades de fin de año. Un promedio de 1.500 estadounidenses llegan diariamente al Aeropuerto Internacional Sao Paulo-Guarulhos, de acuerdo con cálculos oficiales.
Las regulaciones contra el terrorismo en Estados Unidos comenzarán a regir el próximo lunes en los 115 aeropuertos internacionales del país y en 14 de los puertos más importantes.
Permitirán a los agentes estadounidenses realizar investigaciones instantáneas sobre los registros criminales de los inmigrantes o visitantes.
Brasil también requiere visas a los estadounidenses que llegan al país, en respuesta a una medida similar que se aplica para los brasileños que ingresan al territorio de Estados Unidos.
