AP
YANBU, ARABIA SAUDITA.- El embajador estadounidense instó ayer a los ciudadanos de su país a que abandonen Arabia Saudí, después de un fin de semana de atentados que mataron a cinco extranjeros.
Un portavoz de la embajada, en tanto, confirmó que el cadáver de una víctima estadounidense había sido mutilado.
El embajador James C. Oberwetter se reunió durante una hora con la comunidad estadounidense de Yanbu en un hotel cuya fachada fue agujereada con impactos de bala de un enfrentamiento entre policías y atacantes del sábado.
Quienes participaron en el encuentro dijeron que su mensaje fue claro: No los podemos proteger a ustedes, los estadounidenses, aquí.
“Tengo mucho mucho miedo. Aún no sé si vamos a permanecer aquí o no, pero creo que es tiempo de que nos vayamos”, expresó una maestra estadounidense que, al igual que muchos, prefirió no aportar su nombre.
Junto a su esposo decidieron quedarse en Arabia Saudí después de otros ataques anteriores, pero esta vez es diferente, dijo.
Algunos maestros de la escuela estadounidense en la que trabaja vieron el cadáver de una de las víctimas siendo arrastrado en la calle, comentó.
El encuentro con el embajador estuvo vedado a los periodistas, pero en una rueda de prensa Oberwetter confirmó que instó a los estadounidenses a abandonar Arabia Saudí.
“Si bien estamos instando a la gente a salir del país, no los podemos obligar”, explicó. “Son decisiones individuales que deben tomar cada persona y cada empresa”, indicó.
La violencia comenzó el sábado, cuando cuatro hombres ingresaron a las oficinas de una empresa de refinería en Arabia Saudí y comenzaron a disparar a diestra y siniestra, matando al menos a seis personas: dos estadounidenses, dos británicos, un australiano y un saudí.
Los cuatro atacantes, hermanos oriundos de Arabia Saudí, también fallecieron.
Los muertos aún no fueron identificados.