EL SIGLO DE TORREÓN
Gómez Palacio, Dgo.- “Concha” dio a luz a su tercer hijo el pasado ocho de marzo. Desde su embarazo siempre dijo que no quería al bebé. Su dicho fue tal que ya tenía todo listo para “darlo” en adopción. El día del parto se registró en el hospital con el nombre de la futura madre. La abuela natural de la criatura denunció los hechos y evitó que la joven regalara a la recién nacida.
“Concha” tiene 22 años y es adicta a las drogas. Cuestionada sobre la paternidad de la nueva bebé, dijo que es de un tipo que conoce como Rodrigo y que no ve desde hace tiempo. Concha vive en Francisco I. Madero, Coahuila, comparte el techo con una mujer lesbiana y está alejada de su madre.
En la agencia del Ministerio Público de Delitos Sexuales y Violencia Intrafamiliar, Cony Moreno Bocanegra informó sobre los hechos denunciados por María de Jesús Zamora Herrera, abuela de la recién nacida que a la fecha se encuentra en el Hospital General de Gómez Palacio, bajo observación, por el riesgo de haber nacido de una mujer adicta.
María Concepción Lara Zamora, es el nombre de “Concha”, quien desde tiempo atrás se puso de acuerdo con Maigualdia Balderas García, quien se ostenta como abogada en Francisco I. Madero y a quien buscó para cederle a su futuro hijo.
La abuela de la criatura narró a la representante social, que en una de sus parrandas, “Concha” le dijo a sus amigos que no quería tener al bebé. Uno de ellos le dijo que conocía a una abogada que estaría interesada en hacerse cargo del infante.
Con los datos recabados, Concha buscó a la abogada y se pusieron de acuerdo. Para quedarse con el bebé, Maigualdia sólo tenía que pagar los gastos del parto. El nuevo ser estaría destinado para una prima de la litigante, la cual al parecer se encuentra en Ciudad Juárez o en Estados Unidos.
Una vez terminado el acuerdo, “Concha” fue al centro de salud de Francisco I. Madero. Un ginecólogo le dijo que su embarazo estaba muy avanzado y tenía que operarse de inmediato. Durante toda la gestación, “Concha”, nunca acudió al control prenatal, exponiendo así la vida de su hija.
Desde el sábado seis de marzo, “Concha” arribó al Hospital General, pero al registrarse dio el nombre de Alicia Josefina Balderas Ramírez. Todo estaba bien planeado. “Concha” daba a luz y sería la verdadera Alicia quien recogería a “su” hija.
Fue precisamente el sábado, cuando María de Jesús, buscando a su hija, entró a la habitación número 12 de maternidad y encontró a “Concha” acompañada de tres personas más. Una de ellas es la abogada; las otras dos no fueron identificadas.
La agente del Ministerio Público informó que ante la denuncia de María de Jesús, la averiguación previa será integrada por el delito de omisión de cuidados. Será hasta que declaren “Concha” y la abogada, cuando se podrá recategorizar el delito y fincar nuevas responsabilidades.