EL SIGLO DE TORREÓN
Torreón, Coah.- Patrulleros de la Policía Federal Preventiva y Estatal de Caminos, tuvieron que intervenir en un conflicto entre propietarios de terrenos colindantes, ubicados a un costado del Libramiento Periférico, aunque al final no pasó a mayores.
Ayer por la mañana amaneció una barda de protección de 60 centímetros de alto, en un tramo de unos 150 metros, que impide el acceso al restaurante en construcción, denominado “La Casa de la Arrachera”, cerca del hotel Hampton Inn.
Carlos Villarreal Martínez, dueño del predio donde se construye el citado restaurante y Jorge Javier Álvarez Peimbert, concesionario del establecimiento próximo a inaugurar, derribaron la barda donde tienen el acceso, dado que les perjudica en forma directa.
“Es ilegal prohibir el paso a una propiedad privada y no podemos permitirlo, pues se violan en forma flagrante nuestros derechos”, dijo Villarreal Martínez, quien colocó camiones de carga pesada en los dos accesos, tras indicar que esa entrada tiene ya varios años.
Indicaron que el dueño del predio contiguo, Efraín López, es quien ordenó levantar la barda porque pretende quedarse a toda costa con la propiedad de Villarreal Martínez, pero no lo permitirán.
“Según esto, el señor López tiene un permiso de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes para la barda, porque es carril de alta velocidad, pero las autoridades no están considerando que afectan a terceros”.
Luego de un diálogo entre los afectados y los policías, los de la Federal Preventiva se retiraron pero los de la Estatal permanecieron cerca y según el dueño del predio, actuaban a favor de Efraín López, pues amenazaron con llevar grúas para retirar los camiones y levantar de nueva cuenta la barda.
Los afectados manifestaron que harían guardia permanente para evitar que les impidan el acceso al restaurante y el lunes próximo acudirán ante las autoridades competentes para aclarar la situación.