Las autoridades españolas tratan de cercar a los responsables de los atentados en Madrid y en las últimas horas se registró una nueva detención mientras el análisis de diversas pistas afianzan la hipótesis de la autoría de Al Qaeda.
Un ciudadano de nacionalidad argelina, detenido en el País Vasco, en el norte de España, fue puesto a disposición del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón para que investigue si tiene relación con los ataques.
Según informaron fuentes del Gobierno regional vasco, el detenido, cuya identidad no fue facilitada, ya fue arrestado por la Policía en el País Vasco en enero pasado al verse implicado en un delito de tráfico de drogas.
En aquel momento, el acusado opuso resistencia a la policía cuando se intentaba su identificación y comenzó a proferir amenazas con frases como “os vais a enterar, vamos a matar a un montón de madrileños, vamos a llenar las calles de la Castellana (vía del centro de Madrid) de muertos” e incluso citó la palabra Atocha.
Precisamente, dos de los cuatro trenes contra los que los terroristas atentaron el jueves explosionaron cerca de Atocha, estación madrileña que actúa como un importante nudo de comunicaciones ferroviarias para todo el país.
Tras conocerse los ataques, la Policía vasca que interrogó en enero al ciudadano argelino recordaron las frases que pronunció e informaron al Ministerio español del Interior y a los servicios secretos del Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
Seguidamente, la Policía inició la búsqueda del argelino, que fue arrestado ayer en la ciudad vasca de San Sebastián.
Esta detención se suma a la de otras cinco personas que fueron arrestadas en Madrid el sábado por su presunta relación con los ataques. Se trata de los marroquíes Jamal Zougam, Mohamed Bekkali y Mohamed Chaoui y los indios Vinay Kohly y Suresh Kumar, todos ellos presuntamente implicados en la venta y falsificación del teléfono móvil y la tarjeta hallados en una mochila que no llegó a explosionar en los trenes.
Algunos de los detenidos podrían tener vínculos con grupos extremistas islámicos del país magrebí, por lo que agentes españoles han viajado a Marruecos para recabar información sobre ellos.
Varios medios españoles aseguran además que Zougam podría ser uno de los presuntos autores materiales de los ataques y que el grupo responsable sería el mismo que cometió los atentados de Casablanca (Marruecos) el pasado 25 de mayo, dirigidos contra la Casa de España en esa ciudad.
Mientras continúan las investigaciones, los musulmanes residentes en España emitieron ayer un comunicado en el que muestran su preocupación por la reacción social que pudiera generar el desarrollo de estas investigaciones aunque, hasta el momento, no se han producido incidentes.
