Los Ángeles, (Notimex).- Un niño de siete años murió a causa de un disparo en el cuello que él mismo se habría hecho al jugar con un arma de fuego en su casa de Inglewood, confirmaron autoridades policíacas.
El menor de edad Elliot Keyes accionó el arma y el disparo le perforó el cuello mientras se encontraba en su casa, ubicada en los apartamentos Pacific Rim, de Inglewood, en el suroeste de Los Ángeles con predominio de comunidad afroamericana.
Voceros del Departamento de Policia de Los Ángeles (LAPD, por sus siglas en inglés) señalaron que el incidente es investigado por las autoridades, pues aún se desconoce cómo fue que el niño pudo conseguir el arma.
La noticia ha causado estupor aquí, ya que numerosas familias cuentan con armas de fuego en sus hogares, pues es muy fácil conseguir revólveres de mínima calidad por precios desde 50 dólares.
La situación preocupa aún más luego de que hace unos días, autoridades federales levantaron la prohibición -vigente desde la administración Clinton- para la venta de 19 tipos de armas de asalto por su capacidad destructiva.
Ahora, los negocios de ventas de armas están ofertando la compra en promocion de los nuevos modelos AK 47 (Cuerno de chivo), TEC-9s y Uzi, que pueden ser adquiridas con sólo mostrando una identificación y ser mayor de edad.