EDITORIAL Caricatura editorial columnas editorial

La Cumbre

Patricio de la Fuente González-karg

Primera Parte

Hace algunos meses un apreciado amigo que es diplomático de carrera –con rango de embajador- y verdadero estudioso de diversos fenómenos a nivel mundial, me lo dijo con una claridad meridiana: “Mira Pato, a nadie le gusta que Fidel Castro asista a las cumbres pues su innegable carisma y manejo mediático lo hacen ser verdadero amo y señor de cualquier evento, siempre roba cámara”. Coincido plenamente con mi interlocutor, el Comandante es un viejo lobo de mar, su gastada retórica en contra del intervencionismo yanqui, aquella incapacidad para adaptarse a los nuevos tiempos, ese estricto apego a una revolución que está en ruinas lo hacen un elemento iconográfico, último sobreviviente del comunismo, talón de Aquiles para Estados Unidos.

Seguramente el presidente Fox respiró tranquilo cuando supo que Fidel no asistiría a la cumbre en Monterrey. Los efectos y el recuerdo del “comes y te vas” todavía están presentes en el inconsciente colectivo del mexicano común, quien recuerda el desenlace lamentable de un “affaire” que dejó al guanajuatense como mentiroso, torpe en su manejo internacional y circunscrito a la voluntad de nuestros vecinos del norte. Está por demás aseverar que a Castro se le tiene una enorme desconfianza a raíz de ello, y creo, muchos en su sano juicio estarían renuentes a tomarle la llamada.

Las cumbres, si bien a veces apoteósicas puestas en escena que de poco sirven, en ocasiones se convierten en el pretexto ideal para una serie de grupos con intereses particulares. Ahí está el caso de los llamados globalifóbicos, en mi opinión reyes de la anarquía, destructores de la propiedad privada y verdaderos ociosos que le quieren dar la espalda al fenómeno global de desaparición de fronteras, intercambio comercial e interrelación entre las distintas naciones. Cabe destacar que muchas veces asisten a estos eventos con el único fin de llamar la atención, incitar a la violencia y casi nunca son propositivos al presentar vías alternas. En tierras regiomontanas hicieron sus tradicionales desmanes, aprovecharon la coyuntura para allanar establecimientos y claro, el Gobierno Federal parece haberles otorgado cheque en blanco. De veras que son para dar risa.

Es obvio que ciertos jefes de Estado reciben mayor cobertura que otros. Una de las visibles estrellas del evento fue el presidente venezolano Hugo Chávez, quien tiene a su país en franco caos gracias a un actuar populista y demagógico que en teoría pretende emular la postura del cubano Fidel Castro pero que en la práctica únicamente le ha traído desprestigio internacional y, ahora, abierta repulsión por parte de actores políticos que tradicionalmente desconfían de todo lo que huela a izquierda. Chávez, tremendamente simpático e irreverente, declaró que las cumbres de nada sirven, de paso atacó a Estados Unidos y por último denunció una conspiración internacional para derrocarlo.

George W. Bush, el verdadero peligro mundial, ya dijo que apoyará el referéndum destinado a tumbar de la silla a Don Hugo. Si bien coincido en que el mandamás venezolano tiene al país hundido en una crisis de proporciones dantescas y urge su pronta dimisión, también siento auténtico repele hacia el norteamericano, hombre torpe en el manejo interior que pretende un segundo período mediante la abierta injerencia en asuntos que no son de su incumbencia. Ello no debería sorprendernos, la pedantería norteamericana de erigirse como juez y conciencia de los valores supremos no es historia nueva; si revisamos el pretérito nos daremos cuenta que tradicionalmente el poderoso busca incidir en la vida y destino de los débiles.

Bush también tiene puestos sus ojos en Cuba, busca abrir a la isla. No debemos pasar por alto los triunfos y legado de Fidel, dejar de concebirlo como el último gran líder del siglo XX que con verdadera valentía buscó un entorno más justo para sus compatriotas, pero tampoco hay que olvidar que ningún régimen aguanta cincuenta años, ningún pueblo puede vivir eternamente en la opresión. Cuba debe cambiar, la mayoría de sus habitantes hacen una urgente y silenciosa demanda por un entorno de verdaderas libertades e irrestricto apego a los derechos fundamentales del hombre, sin embargo, estimo ello debe ser un proceso propiciado desde el interior. Nada sería más lamentable que una isla invadida por los Mc Donald´s, otro Puerto Rico bien definido por el cantautor Pablo Milanés como “ala que cayó al mar”.

Ahora pasemos al análisis de la actuación de Vicente Fox. Su desempeño fue bastante apropiado, conocido es su buen manejo en la escena internacional, el poder de convocatoria y arraigo entre los distintos líderes que en él siguen viendo al hombre que puso fin a setenta años de hegemonía priista. Durante las distintas intervenciones hizo hincapié en la importancia de lograr cerrar la enorme brecha de desigualdad entre las grandes potencias internacionales y los países pertenecientes al denominado tercer mundo. También pugnó por alianzas estratégicas entre las naciones de América, una estrecha y decidida cooperación con miras a circunstancias de equidad y justicia social.

Ya hablando estrictamente de la relación entre México y Estados Unidos sería importante recordar la aseveración del presidente Fox en cuanto a que “no somos lacayos de los norteamericanos”. Dicho juicio es sintomático de una patología amor-odio donde la parte mexicana es hipersensible, desconfiada, renuente a cualquier opinión que vulnere los principios de soberanía y libre autodeterminación contenidos en la Doctrina Estrada pero a la larga tremendamente dependiente de la opinión de nuestros vecinos del norte. El enamoramiento inicial entre ambos presidentes toma un cariz distinto: Bush necesita el apoyo de México para su lucha contra el terrorismo y también el visto bueno para nuevas acciones poco apegadas a la diplomacia tradicional, es decir, unilaterales, de prevención y bastante gandallas.

Mañana seguiremos metidos en la reseña de los acontecimientos relevantes de la cumbre.

Correo electrónico:

pato1919@hotmail.com

Leer más de EDITORIAL

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 69325

elsiglo.mx