EL SIGLO DE TORREÓN
MATAMOROS, COAH.- Pedro cumplió 13 años apenas hace unos días. El ambiente insano de su colonia y las presiones de sus vecinos lo llevaron a probar la droga. No sabe cómo dejarlas, pero tampoco quiere intentarlo.
Los vecinos de Ampliación Las Carolinas viven atemorizados por grupos de jóvenes que se drogan y provocan destrozos en las casas. Los colonos han recibido amenazas por parte de estos muchachos, cuyas edades oscilan entre los 12 y 18 años.
Las madres de familia están desesperadas porque quieren que sus pequeños vivan en un sitio sano y no en un ?nido de ratas? donde abundan los vicios y las malas costumbres. Algunos vecinos de la calle Donato Guerra, incluso, han optado por cambiar de residencia, pero la mayoría no cuenta con los medios económicos para ello.
Juana María Alvarado, ama de casa preocupada por la situación, pide seguridad. Dice que los gritos y peleas no permiten a su familia dormir. Teme que sus niños vean ese mal ejemplo y sean influidos, como ha observado con sus vecinas, donde a pesar que los padres han estado al pendiente de sus hijos, no escapan de los vicios que acogen a la comunidad.
Los jóvenes se drogan en la vía pública sin que las patrullas de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) o la Policía Ministerial (PM) los molesten. Los drogadictos desmantelan las viviendas, destrozan vidrios y focos, rayan las paredes de las casas, gritan groserías a los ciudadanos y se pelean a golpes en plena calle, a veces con garrotes y piedras.
Leonardo Luévano señala que por la noche llegan drogadictos de otras colonias, se junta un grupo grande de muchachos muy agresivos que gritan vulgaridades por todo el lugar. Las personas han recibido amenazas tanto directas como indirectas por parte de los jóvenes.
Los colonos aseguran que las autoridades municipales prefieren no arriesgarse en la cuestión, pero además ?ponen el dedo? sobre los quejosos, que luego han sufrido represalias tanto en sus viviendas como en su persona. Comentan que las patrullas a veces detienen algún muchacho, pero lo sueltan luego de una cuadra, por la módica cantidad de 50 pesos.
Los líderes de los muchachos aseguran los vecinos son familiares de la regidora del PRI, Martha Neri Acosta, por lo que son ?intocables?.
Los colonos de Ampliación Las Carolinas responsabilizan a las autoridades municipales de cualquier daño que sufran sus viviendas, su persona o familias, por la presente publicación, ya que temen represalias por parte de los jóvenes drogadictos, pero esperan contar con el apoyo de las corporaciones policíacas.
