SAO PAULO, BRASIL.- Ronaldo, Ronaldinho Gaúcho y Adriano, la nueva "máquina de hacer goles" de Brasil, fabricaron ayer en apenas 45 minutos una victoria por 3-1 sobre la selección de Bolivia que aisló al equipo verde-amarillo en el liderato de las eliminatorias sudamericanas del Mundial de 2006 al cabo de la octava jornada.
La muralla que levantó Bolivia con diez hombres en su defensa se derrumbó a los 48 segundos de juego por culpa de Ronaldo, y desde entonces Brasil desató un baile de once jugadores en la cancha y con algo más de 56,000 aficionados en las tribunas del Estadio Morumbi.
La sensación de relajamiento la evidenció el seleccionador Carlos Alberto Parreira tras el fin del primer tiempo en el que también habían dejado su sello goleador Ronaldinho Gaúcho, con un penalty a los 12 minutos y Adriano con un cabezazo a los 43.
"Ahora hay que aprovechar (el segundo tiempo) para entrenar, relajar y alcanzar un resultado agradable", dijo Parreira a la prensa.
Pero lo que se perfilaba como una magistral paliza brasileña se disipó a los 48 minutos cuando Luis Cristaldo recortó diferencias con un remate que tuvo la ayuda del defensa Edmilson.
A los 30 segundos una maniobra de Ronaldo por la derecha desembocó en un córner, que ejecutó Juninho Pernambucano.
Edú conectó de cabeza y el rebote en el césped lo tomó Ronaldo, a los 48 segundos, para empujarla al fondo de la red.
Fue el primer gol del jugador del Real Madrid en su debut con la selección brasileña en el Estadio Morumbi, de Sao Paulo.
La presión brasileña se desató con oleadas intensas y a los once minutos un tiro franco de Roberto Carlos que cayó en el área a los pies de Roque Júnior, obligó a Luis Cristaldo a derribar al defensa.
Ronaldinho Gaúcho cambió por gol a los 12 minutos con un remate al ángulo derecho que pasó cerca de los dedos del portero.
El titular del Oriente Petrolero sería en el segundo tiempo el pilar de la reconstrucción de su equipo, al contener por lo menos ocho remates de peligro.
En el primer tiempo ahogó el grito de Ronaldinho Gaúcho con un vuelo circense para sacar un toque englobado, y cerró el paso de Ronaldo, cuya arrancada desde atrás, por la izquierda, provocó una loca persecución de los defensas verdiblancos.
El delantero boliviano Joaquín Botero, solitario como el Llanero, perdió por falta de habilidad o lentitud, tres claras maniobras de contragolpe a las que la defensa brasileña llegó tarde para cubrir.
Los gritos taurinos de "ole" rompieron el silencio en el Morumbí a los 40 minutos y tres después, en medio de la algarabía, Ronaldinho Gaúcho, que se paseaba con el balón por la banda izquierda, elevó el balón al centro del área para que el "Emperador" Adriano, el goleador de la última Copa América, marcara de cabeza en majestuoso salto el tercer gol del partido.
El "entrenamiento" que planeaba Parreira para el segundo tiempo se complicó a los tres minutos del mismo, cuando Luis Cristaldo ensayó un remate al borde del área que Edmilson, por querer desviar de cabeza, acabó clavando en el fondo de su portería.
Para entonces Ramiro Blacut había enviado a la cancha a Ronald Arana y Rubén Tufiño a cambio de Luis Ribeiro y Percy Colque. Sin reacción ante la nueva propuesta boliviana, Parreira cambió al astro de Barcelona por Alex y a Juninho Pernambucano por Renato.
Los del altiplano encontraron, tras mucho sufrimiento, la combinación para abrir el cerrojo brasileño. Los de casa, sin poder tejer jugadas colectivas, quedaron a merced de la inspiración individual, lo que no terminó de convencer a los "torcedores".
Leo Fernández creció como figura en la medida que los de Parreira dejaron de lado el libreto táctico y arriesgaron por su cuenta.
Brasil terminó la octava jornada con 16 puntos y dejó a Bolivia en el último puesto de la fila, con seis.
Alineaciones:
3.- Brasil: Julio César; Belletti, Edmilson, Roque Júnior, Roberto Carlos; Gilberto Silva, Juninho Pernambucano (Renato, minuto 60), Edú (Robinho, minuto 73); Ronaldinho Gaúcho (Alex, minuto 60), Ronaldo y Adriano. Director técnico: Carlos Alberto Parreira.
1.- Bolivia: Leo Fernández; Óscar Sánchez, Juan Manuel Peña, Ronald Raldes, Lorgio Álvarez; Limbert Pizarro, Luis Cristaldo, Percy Colque (Rubén Tufinho, minuto 46), Luis Ribeiro (Ronald Arana, minuto 46), Limberg Gutiérrez (Milton Coimbra, minuto 76); y Joaquín Botero. Director técnico: Ramiro Blacut.
Goles: 1-0, minuto uno: Ronaldo. 2-0, minuto 12: Ronaldinho Gaúcho, de penalty. 3-0, minuto 43: Ariano 3-1, minuto 48: Cristaldo.
Árbitro: El argentino Héctor Baldassi amonestó a L. Pizarro, Belletti y Álvarez.
Incidencias: Partido de la octava jornada de las eliminatorias sudamericanas del Mundial de Alemania 2006 disputado ante 56,099 espectadores en el Estadio Cícero Pompeu de Toledo, "Morumbi", de Sao Paulo.
Simoes dice que novia Ronaldo es "la mejor preparadora de Brasil"
El entrenador de la selección femenil de futbol de Brasil, René Simoes, afirmó ayer que Daniela Cicarelli, la novia del delantero Ronaldo, es la mejor preparadora física del país.
Simoes elogió la buena forma, la explosión física y la velocidad exhibida por el jugador del Real Madrid, que ayer marcó uno de los tres goles con los que Brasil derrotó por 3-1 a Bolivia en partido correspondiente a la octava jornada de las eliminatorias sudamericanas del Mundial de Alemania 2006.
"Daniela Cicarelli es la mejor preparadora física de Brasil.
Nunca vi a Ronaldo en tan buena forma, él está con una explosión espectacular", dijo a la Rede Globo de televisión el entrenador que llevó a la selección femenil a la conquista de la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Atenas.
Ronaldo necesitó apenas 48 segundos para confirmar su buen momento y marcar el primer gol del partido y su primero con la selección en el Estadio Morumbi, donde ayer debutó.
Al celebrar el gol, Ronaldo, que hasta hace meses era criticado por su visible exceso de peso y hoy luce delgado, llevó el brazo a la cabeza, un gesto que previamente había pactado con su novia.
Cicarelli, que es conocida en Brasil como modelo y presentadora de televisión, lloró en la tribuna tras el gol de su novio.
