El Siglo de Torreón
Torreón, Coah.- En 12 días, los laguneros han visto la discriminación que aún sufren los indígenas en México, la pobreza de Cuba, la situación que predomina en Líbano e Israel, el sentido del humor de los noruegos y muchos otros aspectos de países como Gran Bretaña, Alemania, Francia y Brasil... y todo gracias al séptimo arte.
Esta noche llegará a su fin la 43ª Muestra Internacional de Cine con un filme impregnado de dramatismo a varios niveles, se trata de película italiana Buenos Días Noche, la cual será proyectada en funciones de 18:00 y 20:30 horas en Cinépolis Cuatro Caminos.
Del director Marco Bellocchio, Buenos Días Noches retoma el secuestro y asesinato del primer ministro Aldo Moro a manos de las Brigadas Rojas en 1978, uno de los episodios más siniestros y absurdos de la historia italiana contemporánea.
El filme inicia cuando el grupo terrorista Brigadas Rojas secuestra a Aldo Moro, primer ministro de Italia, y lo mantiene como rehén dentro de una guarida ubicada dentro de una modesta casa de una unidad habitacional de los suburbios de Roma. Anna, la integrante más joven de la célula subversiva, es también la única mujer, por lo que debe asumir el papel de ama de casa ante sus tres compañeros varones, además de mantener un aburrido trabajo administrativo en la biblioteca local.
Con el paso de los días, y mientras los terroristas negocian el rescate de Moro con las autoridades, Anna cuestiona duramente su papel dentro de estas maquinaciones políticas, y aunque no aumenta su conciencia social, sí llega a sentirse culpable ante la creciente posibilidad de ejecutar al cautivo.
El director libera la tensión mediante un buen número de recursos; uno de ellos es la presencia dentro del escondite de un aparato televisor siempre encendido, el cual construye un telón de fondo a partir de una serie interminable de programas musicales de los años setenta. De esta manera, Bellocchio logra un interesante juego entre lo trágico y lo banal.
Buenos Días Noche está fundamentada en una premisa muy sólida, al abordar los tópicos de la responsabilidad y la dinámica inherentes al ejercicio del poder, temas en los que una gran cantidad de artistas italianos han dejado muestra de sus cualidades.
