SUN-AEE
NUEVA YORK, EU.- La familia es lo más importante para los actores Tim Allen, Jamie Lee Curtis y Dan Aykroyd en Navidad, por lo que el mejor festejo es estar en compañía de aquellos a los que tanto aman.
Allen siempre tiene presentes esas bulliciosas cenas en
compañía de su hija, nueve hermanos y sobrinos; Aykroyd recuerda
la Navidad de su infancia en un barrio típico lleno de luces y
decorados, y Curtis incluso dará punto final a su carrera para
consagrarse a su familia de tiempo completo y no sólo en fechas
especiales como Nochebuena.
"En Navidad usualmente tengo cerca a mi hija. Me reúno con mis
hermanos. Somos nueve. Ellos tienen hijos. Nos juntamos todos y
hay ocasiones en las que todo parece una pesadilla,
particularmente cuando hablas de política. En las fiestas de mi
familia, mientras estés alejado de la política y la religión
estarás bien", comenta Allen, de 51 años.
Aykroyd platica que sus hijos más bien están habituados a
ambientes urbanos como Los Angeles, por lo que nunca han vivido
en un barrio como el que él habitó de pequeño en su natal
Canadá, donde todo se cubría de un ambiente festivo en Navidad y
esta fecha era casi una obsesión para sus vecinos.
Mientras que Curtis argumenta que su decisión de finalizar su
carrera como actriz es la opción que eligió entre los viajes,
llamados de grabación y chismes de prensa, y su familia.
"Mi opción son mis hijos. Ellos merecen todo mi tiempo", dice
la actriz, quien se ha convertido en una exitosa autora de
libros infantiles.
Los tres actores se reunieron y exploran su vena cómica en la
película "Una Navidad de locos", que se estrena mañana en
México. Dirigida por el veterano productor Joe Roth, la cinta se
basa en el best-seller Una Navidad diferente, de John Grisham,
conocido más bien por sus dramas jurídicos.
La adaptación corrió a cargo del director y guionista Chris
Columbus, quien fue el artífice de las dos primeras entregas de
"Harry Potter". La historia del filme es sencilla. Luther y Nora Krank (Allen y
Curtis) son una pareja que año tras año festeja religiosamente
la Navidad. Un día, algo inesperado sucede poco antes de esa
fecha: su única hija se va de voluntaria a Sudamérica y la
pareja se queda sola.
Entonces, los Krank deciden "evitar" la Navidad e irse al
soleado Caribe. Ahí empiezan los enredos en su barrio adorador
de la Nochebuena. Para colmo, su hija decide regresar de último
momento para la cena, y Luther y Nora tienen que recuperar su
espíritu festivo.
"He agendado por años evitar la Navidad. Pero por opción, nunca
lo he hecho. Si puedes salir en cualquier otra época, por qué en
Navidad", destaca Allen, quien saltó a la fama por su serie
televisiva Mejorando la casa y tiene experiencia con historias
navideñas gracias a sus cintas "Santa Cláusula", uno y dos.
Curtis, de 46 años, aparece en una escena en traje de baño,
pese a que no tiene el cuerpo de hace unos años; y aprovechó
esta anécdota para profundizar en cómo se siente hoy.
"Ahora me siento más cómoda conmigo misma. Me aprecio más",
expresa la actriz, quien dice que está orgullosa de ella como
mujer. "Mi audiencia y yo hemos crecido. Tengo un público muy
diverso".
"En mi carrera he demostrado que soy capaz de hacer todo lo que
me han pedido. No estoy obsesionada con hacer la mejor película
de todas antes de que muera; y siempre me ha interesado
mejorar", añade.
Aykroyd, quien tras alrededor de tres décadas de carrera dice
no pensar en el retiro, relata que en su barrio de infancia vio
una historia similar a la de los Krank.
"Esta película muestra esas estructuras poco convencionales de
la sociedad, como su obsesión por celebrar la Navidad", explica
el también músico, de 52 años, que en la actualidad se ha
enfocado a gozar de esta fascinación por el arte sonoro.
