Además de la competencia impresionante que afrontan los medios en general, la prensa escrita atraviesa en estos tiempos por una crisis estructural de dramáticas proporciones.
Tanto en Estados Unidos como en el resto del Continente Americano, el número de diarios decrece al tiempo que las circulaciones se estancan y los ingresos de publicidad languidecen ante el embate de la radio, la televisión, el Internet y las agresivas campañas promocionales de las megacorporaciones.
El caso único de crecimiento en la prensa escrita ocurre actualmente con los diarios en español de Estados Unidos que registran aumentos importantes en circulación y publicidad ante el sorprendente “boom” de la población latina.
Pero fuera de Norteamérica las perspectivas de los medios escritos son poco favorables al menos para los periódicos tradicionales que se niegan a modernizar y a ofrecer a sus lectores innovaciones de fondo.
Las razones de este decrecimiento son muchas, pero quizás una de las más importantes es la ausencia de lectores jóvenes que prefieren acudir a medios informativos más visuales e interactivos como la televisión y el Internet.
La otra razón de esta parálisis son las constantes agresiones contra los periodistas y la falta de garantías para realizar su trabajo con libertad, especialmente en países conflictivos como Colombia, Brasil, Guatemala, México y Haití, entre otros.
El tema viene a cuento porque el próximo viernes se reunirán en Los Cabos, México, varias decenas de periodistas y editores de diarios del Continente Americano quienes analizarán durante tres días los tiempos difíciles que vive la prensa escrita.
A la reunión de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) asistirán personalidades de la talla de Gabriel García Márquez, quien en un evento similar celebrado en 1994 en Los Ángeles presentó una ponencia magistral sobre los retos del periodismo en español.
“El periodismo es el mejor oficio del mundo”, diría en aquel entonces el popular Premio Nobel de Literatura, no sin antes destacar que por la modernización se había perdido en muchas ocasiones la esencia y profundidad del periodismo hispano.
Otra de las figuras sobresalientes que participará en Los Cabos será el periodista Jorge Ramos, conductor nacional de Univisión y quien se ha consolidado como uno de los comentaristas de televisión hispana más agudos y profesionales de los Estados Unidos.
Ramos salió de México hace 20 años huyendo de la corrupción y la baja calidad del periodismo mexicano para abrirse paso con tenacidad y destreza en el competido mundo norteamericano. Hoy en día Ramos es considerado uno de los líderes latinos más influyentes.
En esta reunión se recordará la dramática realidad de los 281 crímenes de periodistas en América en los últimos 15 años, la mayoría de los cuales permanece impune a pesar de los reiterados reclamos de familiares y del gremio periodístico.
En Colombia es donde se vive la peor situación con un total de 125 periodistas asesinados en estos quince años, pero en México no cantamos mal las rancheras con 37 crímenes mientras que Brasil registró 22, Guatemala 21, Perú 20 y El Salvador 17.
La SIP ha realizado grandes esfuerzos por combatir este fenómeno bajo la creación de un Comité de Impunidad que organiza foros, giras y campañas de todo tipo para lograr que tales crímenes se esclarezcan y sus autores sean apresados y juzgados.
En México la prensa se transformó radicalmente en los últimos diez años, pero quedan muchos retos por resolver como las leyes de acceso a la información, las agresiones del narcotráfico y la profesionalización misma del sector.
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