FRANCORCHAMPS, BÉLGICA.- La suerte se alió ayer con los Renault del italiano Jarno Trulli y Fernando Alonso, que ocuparán la primera y la tercera posición en la formación de salida del Gran Premio de Bélgica, al haber podido rodar en la sesión de clasificación antes de que la lluvia volviera a caer.
Los entrenamientos libres de la mañana habían quedado reducidos a tan sólo quince minutos por culpa de la niebla, que impedía que los helicópteros pudiesen volar, y la lluvia torrencial.
Cuando Trulli salió a la pista pudo hacerlo con neumáticos intermedios de lluvia, con anterioridad había observado a los rivales que le precedían cómo se comportaban sus coches, y la apuesta fue ganada, con una vuelta perfecta.
Fernando Alonso, también con neumáticos intermedios, se vio superado la mitad del corrido con un chaparrón, que aunque no muy fuerte sí hizo que las condiciones de adherencia disminuyeran algo y al final su tiempo fuera superior en cuatro décimas al de su compañero de equipo y eso al final le iba a garantizar un puesto en la segunda fila.
A pesar de las condiciones cambiantes el alemán Michael Schumacher (Ferrari F2004) lograba un puesto en la primera fila al lado de Trulli, a pesar de que perdía el control del coche en la quinta curva y ya casi al final en la denominada "parada de autobús".
Junto a Alonso, en la segunda fila, estará el británico David Coulthard (McLaren-Mercedes) quien perdió el control del coche de forma momentánea y eso le hizo quedarse a un segundo y tres décimas de Fernando Alonso.
Para hoy la previsión es que durante la carrera puedan caer chubascos y el resultado de la misma puede ser una lotería como ha sido hoy la sesión de clasificación.