EFE
LOS ÁNGELES, EU.- La polémica sigue persiguiendo a Los Ángeles Lakers después de la manera como los árbitros pitaron el tercer partido de las finales de la Conferencia Oeste que ganaron por 100-89 a los Timberwolves de Minnesota para ponerse con la ventaja de 2-1 en la eliminatoria al mejor de siete.
Nada menos que 43 tiros de personal hicieron los Lakers por tan sólo 14 para los Timberwolves, algo que el entrenador del equipo de Minnesota, Flip Saunders, calificó como "ridículo" y "sin sentido" dentro de lo que debe ser un partido de baloncesto, al margen que su estrategia fuese la de forzarlas contra el pivot Shaquille O’Neal.
Sin embargo, los Lakers a pesar de todas las oportunidades que tuvieron desde la línea de personal, especialmente, O’Neal, no las aprovecharon al máximo y se quedaron con 25 puntos para un 58,1 por ciento de acierto, pero sí fueron 13 más de los 12 que tuvieron los Timberwolves.
O’Neal volvió a ser el gran favorecido con las personales al ir 22 veces a la línea de personal y anotar sólo ocho puntos de los 22 con que terminó el partido para ser el máximo encestador.
El pivot estrella de los Lakers sí dominó en los tiros de campo con siete de diez y capturó 17 rebotes para ser el jugador clave en el triunfo de los Lakers.
El alero Kobe Bryant tardó en entrar en acción, no anotó en la primera parte, pero lo hizo de nuevo en los momentos decisivos del cuarto periodo para aportar también 22 puntos (cinco de 12 tiros de campo, incluidos dos triples, y diez de 11 desde la línea de personal), dio seis asistencias y capturó dos rebotes.
El base Gary Payton sumo 18 puntos, incluidos 14 en el primer cuarto, para quedarse con ocho de 11 tiros de campo y dos de cinco triples, dio nueve asistencias y capturó cinco rebotes, siendo el partido más completo que jugó en lo que va de la fase final.
Las acciones de Payton fueron decisivas en la primera parte al establecer el ritmo del partido y no permitir que los Timberwolves impusiesen de nuevo su defensa agresiva y de doble equipo.
El alero Karl Malone cumplió con 11 puntos, seis rebotes y cinco asistencias, mientras que Devean George también estuvo acertado en el ataque y aportó 12 tantos para los Lakers, que tuvieron un 51,5 por ciento de acierto en los tiros de campo.
Los Timberwolves lucharon e intentaron todo en el campo, pero sus acciones defensivas fueron siempre interpretadas por los tres árbitros como merecedoras de faltas y ahí les cortaron siempre todo el ritmo y la intensidad.
El alero Kevin Garnett volvió a ser el líder de los Timberwolves al conseguir 22 puntos (nueve de 21 tiros de campo y tres de cuatro desde la línea de personal), capturó 11 rebotes y dio siete asistencias.
El reserva y Sexto Jugador, Wally Szczerbiak, jugó su mejor partido de la fase final y aportó 21 puntos con seis de 12 tiros de campo y perfecto desde la línea de personal siete de siete, capturó siete balones bajo los aros y dio dos pases de anotación.
Szczerbiak anotó 19 puntos en la segunda parte, incluidos 14 puntos consecutivos en el tercer periodo.
El base Sam Cassell, a pesar de no estar al cien por ciento físicamente, cumplió con su trabajo al conseguir 18 puntos, pero sólo dio dos asistencias.
El factor sorpresa, pero negativo para los Timberwolves, esta vez fue el alero Latrell Sprewell, que consiguió 18 puntos, pero la mayoría de ellos los consiguió cuando el partido ya estaba decidido en los últimos minutos del cuarto periodo.
Antes Sprewell no surgió en los momentos decisivos y eso le costó a los Timberwolves no tener la opción de ponerse por delante en el marcador.
El cuarto partido de la serie se disputará en el mismo escenario del Staples Center y la gran novedad será de nuevo el presenciar el "showtime" al que ya tiene acostumbrado Bryant después de que por la mañana estará en el juzgado del Condado de Eagle (Colorado) para asistir a la quinta audiencia del caso de presunta violación sexual de una joven de 19 años que pesa en su contra.
Defensa es clave en el Este
A diferencia de la Conferencia Oeste, donde lo que ha imperado es el poder ofensivo, en la final de la Conferencia Este de la Asociación Nacional de Basquetbol (NBA) lo que ha predominado es la defensiva.
Hoy se reanudará la serie entre los Pistones de Detroit y los Pacers de Indiana, en "El Palacio" de Auburn Hills, casa de Pistones, con la confrontación del Este empatada a un triunfo por bando.
Los dos primeros cotejos de la serie por el cetro de la Conferencia Este muchos podrán calificarlos de poco espectaculares, incluso feos, pero lo que sí es innegable es que en esta serie se está desarrollando un basquetbol de mucha fuerza y estrategia.
Esto no quiere decir que en el Oeste no se esté dando este aspecto también, pero ni Minnesota ni Los Ángeles ponen el énfasis en la defensa como lo han hecho no sólo en esta serie sino en toda la temporada los Pistones de Detroit y los Pacers de Indiana.
Y es que en la confrontación entre Indiana y Detroit los números hablan por sí solos de lo férreas que han sido las marcaciones en estos dos primeros cotejos, en donde en ambos encuentros ninguno de los oponentes ha logrado rebasar la barrera de los 80 puntos.
En el primer duelo, que ganaron los Pacers 78-74, el marcador refleja fielmente lo intenso de la lucha de estos equipos en la duela y si bien Indiana tuvo el porcentaje de aciertos más bajo en este duelo, 34 por ciento por el 41 de Pistones, ellos supieron anotar en el momento decisivo para inclinar la balanza a su favor.
En este primer partido, ambos equipos atraparon 53 rebotes y consiguieron una respetable cantidad de puntos en la zona pintada, 38 por Indiana y 28 de Detroit, pero la mejor ejecución y la sangre fría de un veterano como Reggie Miller terminó por darle la victoria a Pacers.
Para el segundo duelo, donde el triunfo fue para Pistones por 72 a 67, la presión defensiva se intensificó y los porcentajes de efectividad en los tiros de campo bajaron más, pues Indiana sólo acertó el 27.5 de sus tiros al conectar 22 de sus 80 lanzamientos al aro, mientras Detroit anotó 23 de los 66 que intentó.
Difícilmente se podrán esperar muchos cambios en esta serie, que se reanudará hoy, ya que estos dos equipos fueron los que mejor defendieron a lo largo de la campaña regular y no hay razón para cambiar el esquema.
Esta serie tiene un ingrediente extra que le da un toque especial, el deseo del entrenador de Indiana, Rick Carlisle, de vencer a su ex equipo, pues hay que recordar que la campaña pasada luego de que Pistones perdiera la final de Conferencia ante Nets de Nueva Jersey, Carlisle fue cesado.
