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NUEVO LAREDO, Tamps.- El consulado de México en Laredo, Texas, extendió la alerta a las personas que pretendan cruzar el río Bravo como indocumentados y previno de las altas temperaturas mediante avisos en las riberas del mismo río, ya que hasta el momento han fallecido en la frontera que comparte con Nuevo Laredo, 31 personas.
Alejandro López Vago, responsable del área de protección al migrante, estableció que en el lado estadounidense del río ya murieron 14 mexicanos, tres por deshidratación y seis ahogados.
Asimismo, mencionó que dos mexicanos más perdieron la vida en accidentes automovilísticos, uno murió atropellado, otro más falleció bajo las ruedas del ferrocarril y uno por mordedura de animal ponzoñoso, mientras que otro connacional murió en enero por congelamiento.
De esa cantidad, dijo el funcionario de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), sólo tres de los cuerpos no han sido identificados, por lo que es seguro que se vayan a la fosa común en caso de no ser reclamados.
También ayer, una coalición de grupos de derechos humanos de la frontera entre California y México informó ayer que en lo que va de 2004 han muerto 220 indocumentados en la franja estadundiense limítrofe con México.
La Coalición Prodefensa del Migrante informó en un comunicado que “según estadísticas proporcionadas por la Secretaría de Relaciones Exteriores (de México), desde principios de enero de este año se han contabilizado las muertes de 220 migrantes”.
Según el comunicado, 55 de esas muertes ocurrieron “únicamente en el pasado mes de julio, pese a la aplicación de medidas con que el Gobierno de Estados Unidos pretende reducir dramáticamente las muertes en el intento de cruzar la frontera”.
La coalición que integra a ocho grupos de ambos lados de la frontera detalló que 65 indocumentados que perecieron este año continúan sin ser identificados.
López Vago comentó que cuando el consulado se entera de la muerte de algún mexicano, de inmediato se localiza a los familiares con el apoyo de otras instituciones de ambos lados de la frontera, por lo que dijo que en gastos de traslado hasta el lugar de origen de la víctima, Relaciones Exteriores aporta aproximadamente dos mil dólares para esos fines.
“El consulado trabaja en coordinación con autoridades de México para establecer las medidas de prevención hacia los mexicanos que pretendan cruzar las aguas del río Bravo”, dijo López Vago tras mencionar que no se puede impedir el cruce pero sí alertar de los riesgos que existen en la región.
En el lado mexicano, de acuerdo con informes ofrecidos por Rafael Sandoval, responsable de protección civil municipal, 17 mexicanos han muerto ahogados en lo que va del presente año, por lo que al igual que las autoridades consulares de México, mantienen la alerta en sus márgenes.
