Atletas de Cuba, México, República Dominicana, Ecuador y Brasil participarán en estos Juegos con la ilusión de consagrarse tras cuatro años de intenso fogueo.
12 de agosto de 2004
ATENAS, (Reuters) - Sin grandes pretensiones, pero con firmes zancadas, el campo y pista latinoamericano aspira a revolucionar su historia en los Juegos de Atenas, donde varios de sus atletas apuestan a un lugar de privilegio en el medallero olímpico.
Dejando atrás los tiempos en que el dominio era exclusivo de estadounidenses, europeos y africanos, atletas de Cuba, México, República Dominicana, Ecuador y Brasil participarán en estos Juegos con la ilusión de consagrarse tras cuatro años de intenso fogueo. "Los atletas cubanos se encuentran bien preparados y motivados para brindar varias sorpresas en Atenas", dijo Alberto Juantorena, doble campeón olímpico de Montreal 1976 y presidente de la Federación Cubana de Atletismo.
Dos cubanas, con la jabalina y el martillo, son candidatas a sobresalir en el atletismo, cuyo torneo comenzará el 18 de agosto.
La plusmarquista mundial en lanzamiento de la jabalina, Osleidys Menéndez y la doble campeona del orbe en martillo, Yipsi Moreno, han brillado en Europa y llegan a la cita griega con la credencial de favoritas.
Ambas encabezan el escalafón de sus especialidades, con 68,23 metros (jabalina) y 75,18 (martillo), respectivamente.
Otra de las mujeres de Cuba, Yumileidi Cumbá, en bala, llevó el implemento el fin de semana último hasta 19,97 metros y se colocó como seria aspirante a una presea, además de estar a punto de ingresar al exclusivo club de los 20 metros.
A diferencia de hace cuatro años en Sydney, donde el atletismo cubano consiguió dos medallas de oro (Iván Pedroso en longitud y Anier García, en 110 metros vallas), las muchachas de la isla constituyen ahora la máxima esperanza.
Las posibilidades de medallas son discretas para Pedroso (7.78 metros) y García (13,34 segundos), pero las autoridades deportivas locales confían en sus habilidades y experiencia para defender sus coronas en Grecia.
GREGORIO TRAS LOS PASOS DE OLIVEIRA
Para México, las expectativas se abren con la velocista Ana Gabriela Guevara, campeona mundial de París 2003 en 400 metros.
Y aunque en sus últimas presentaciones en Europa le ha visto la espalda al cruzar la meta a Tonique Williams, de Bahamas, lo cierto es que va recuperándose (49.74 segundos en Roma) y es una carta a tener en cuenta por sus rivales.
Otras adversarias de cuidado tendrá la mexicana Guevara en la justa helénica, entre ellas la senegalesa Amy McBacke Thiam y la jamaiquina Lorraine Fenton, tercer y segundo lugares en París hace un año.
Por su parte, la presencia en la pista de Atenas de su ídolo Félix Sánchez, doble monarca mundial en 400 metros vallas, en Atenas, representa la cercana probabilidd de conquistar la primera medalla de oro olímpica para República Dominicana.
Sánchez (47,25 segundos) está en la cresta de la ola y quiere reafirmarse como la estrella mundial de esta distancia en el nuevo siglo.
"No quiero anticiparme por el récord mundial (46,78 segundos); tengo tiempo todavía porque la mayor satisfacción es un oro para Dominicana", dijo Sánchez.
Desde el 2001, poco antes de ganar su primer cetro mundial en Edmonton, el atleta dominicano demostró gran capacidad para atacar la plusmarca del orbe en poder desde hace 12 años del estadounidense Kevin Young en las Olimpiadas de Barcelona 1992.
Entre las motivaciones al medallero por Latinoamérica en Grecia, la embajada deportiva de Ecuador estará guiada por las piernas de su astro Jefferson Pérez, monarca olímpico en Atlanta 1996 y recordista mundial en los 20 kilómetros de la marcha deportiva (1:17.21 hora, en París 2003).
Los ecuatorianos apuestan fuerte a este pequeño andarín que ya estuvo en junio pasado en Atenas, donde observó el trazado de su prueba.
"Yo me estoy preparando para un trayecto difícil, complicado", ha dicho Pérez, quien también competiría en 50 kilómetros, a la prensa.
Brasil, otra de las naciones con perspectivas al podio olímpico concentra sus esperanzas en el saltador de triple Jadel Gregorio.
Una marca de 17.72 metros lo sitúan como nunca antes en su afán de conquistar un metal de cualquier color en Atenas.
Gregorio, de 23 años, 2.02 metros y subtitular panamericano en Santo Domingo y como plata en el Mundial bajo techo de Budapest está en la elite de su disciplina.
El brasileño viajará a Grecia con la intención de continuar la brecha abierta por sus predecesores Adamar Ferreira da Silva, campeón en Helsniki '52 y Melbourne '56, Nelson Prudencio, plata en México '68 y bronce en Múnich '72 y Joao Carlos de Oliveira, bronce en Montreal '76 y quien en 1975 clavó sus pinchos en 17,89 metros para imponer récord mundial.
