TORREÓN, COAH.- Habitantes de un sector de la colonia Antigua Aceitera esperan desde hace más de 20 años la pavimentación en su calle. Promesas van y promesas vienen en cada administración municipal, pero su deseo no se hace realidad.
Se trata de un tramo de 160 metros sin asfalto en la avenida Cuarta. Justo en la intersección que forma con la avenida Luis Reyna, donde se encuentra el templo de San Rafael Arcángel. A partir de este punto, la rúa terrosa continúa hasta angostarse sobre las vías del tren y el cruce hacia el mercado Alianza.
Esta pudiera ser un camino alterno, expone Santiago Martínez quien tiene su vivienda en la casa marcada con el número 389 donde mora desde hace tiempo. Considera que muchos automovilistas pudieran transitar por ahí cuando el paso del tren imposibilita entrar a la colonia Compresora por el lado de la unidad habitacional conocida como Luis Reyna que está dentro de los límites de la Antigua Aceitera.
Cuando el tren esté sobre el acceso al Mercado Alianza, los usuarios podrían entonces caminar o conducir su automóvil por la avenida Cuarta hasta la Luis Reyna para pasar a la Compresora. Por eso la rehabilitación de esta calle es importante para los colonos de este sector.
?Cuando está atravesado el tren, los automovilistas tienen que rodear por el bulevar Revolución para entrar por el lado del mercado Alianza hacia la Compresora?, expone Santiago quien explica que éstos evitan ingresar por la avenida Cuarta, por la falta de pavimentación.
Lo mismo piensa Guadalupe Olivo González, cuya vivienda se ubica en esta rúa, que pudiera ser un paso más directo para los conductores que para ahorrar tiempo en veces si se atreven a pasar su unidad por el camino disparejo y polvoriento.
Guadalupe y Santiago, son vecinos que junto con el resto de los colonos afectados, han gestionado ante Presidencia Municipal la obra de pavimentación y que sólo ha quedado en promesas. Explican que hasta ha acudido al lugar el Secretario del Ayuntamiento, Alfonso Tafoya, quien hasta el momento no ha hecho ni una acción concreta para abatir el problema que los aqueja desde hace años.
?Puras promesas se vuelven los funcionarios del municipio?, comenta Guadalupe quien afirma que todos los vecinos que tienen su vivienda en esa área cumplen en forma cabal con el impuesto del predial, por lo que les brinda el derecho de exigir el asfalto para su calle.
Desean el progreso para su sector. Pero también quieren vivir con más comodidad pues la tierra se levanta con el viento y ensucia sus muebles y pisos. Cuando llueve, el lodo lo arrastran con cada paso hacia el interior de sus casas.
?Además esta área se inunda y no se pude ni caminar o transitar por aquí?, señala Guadalupe quien demanda a las autoridades correspondientes, una solución pronta y oportuna para una obra que está segura, sí existe el recurso económico, pero no la voluntad.
