El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Víctor Guerrero Pérez fue asesinado luego de consumir bebidas embriagantes y cocaína en compañía de sus amigos en la colonia Eduardo Guerra. La Mesa Uno de la Agencia del Ministerio Público de la Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE), todavía no determina quién es el responsable.
Los hechos fueron reportados a la Agencia del Ministerio Público a las 08:30 horas por la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), se presume que el asesinato se registró por lo menos 50 minutos antes, también resultó herido de gravedad Felipe de Jesús Carrera Pineda.
Víctor Guerrero Pérez tenía 35 años de edad, era taxista de la Línea Amarillo, manejaba el vehículo económico número dos. Fue trasladado por la Cruz Roja al Hospital Universitario, sin embargo, falleció por la herida que le provocó el proyectil de arma de fuego en el lado derecho de su pecho.
Están a disposición de la Agencia del Ministerio Público: Joel Hernández Chaírez de 44 años de edad, con domicilio en la avenida Quinta, número 1393 de la colonia Eduardo Guerra; Santos Quiroz Espinoza de 32 años, con domicilio en la calle Primera, número 606 del mismo sector habitacional.
Jesús Estrada Calamaco, de 30 años, con domicilio en la privada Jovea, número dos de la colonia Eduardo Guerra, también está en custodia y en calidad de detenido en el Hospital Universitario, Felipe de Jesús Carrera Pineda, su estado de salud es reportado como grave.
De acuerdo a información proporcionada por Liliana López de la Cruz, Agente del Ministerio Público, todos se encontraban en casa de Santos Quiroz, lugar donde estaban ingiriendo bebidas embriagantes en exceso y cocaína.
A las 21:00 horas de ayer, la Agencia del Ministerio Público desconocía quién fue el responsable del asesinato de Víctor Guerrero Pérez, pues los detenidos no habían rendido su declaración y no se les aplicaba la prueba de rodisonato de sodio, pero se informó que fue herido de muerte con el rifle calibre 22, propiedad de Joel Hernández.
En la casa de Santos Quiroz se encontraron dos casquillos y el rifle, mientras que el domicilio de Joel Hernández fue asegurado. La Agente del Ministerio Público descarta que se trate de un crimen pasional.
Al parecer, dijo, Joel Hernández se encontraba dormido y cuando despertó se dio cuenta que le habían robado dinero de su cartera, enojado se fue para su casa y luego regresó con el rifle, entonces Jesús Estrada y Santos Quiroz, lo golpearon para tratar de quitárselo, la Agencia del Ministerio Público desconoce si los disparos se realizaron antes o después del forcejeo.
