BERLIN, (Reuters) - Un alemán se vio obligado a invitar a dos policías a su boda después que los agentes del orden lo arrestaron por conducir su automóvil en estado de ebriedad el día en que iba a casarse, y lo llevaron en su patrulla a la oficina del registro civil, dijeron las autoridades.
"Los policías felicitaron a los novios y les desearon muchos años de dicha", dijo un vocero del cuartel policial en la norteña ciudad de Bremen.
Los agentes arrestaron al novio borracho, un hombre de 36 años, cuando este estrelló su auto y no pudo disimular que había estado consumiendo bebidas alcohólicas.
El hombre dijo a los agentes que había estado de parranda toda la noche para celebrar su boda y que en ese momento iba camino a una florería, a comprarle un ramo de flores a la novia.
"Al vernos, todos los invitados se abstuvieron de beber la obligada copa de champán luego de la ceremonia", dijo uno de los policías.
"Durante la sesión de fotografías, el novio tuvo grandes dificultades para mantenerse de pie y sonreír", agregó.
Mientras los invitados disfrutaban de la fiesta, el flamante esposo tuvo que acompañar a los policías al cuartel para que el médico de guardia le hiciera un análisis de sangre, y después la madre del recién casado se llevó a su hijo a la fiesta, manejando ella, naturalmente.
"Tendrá que prescindir de su licencia para conducir durante un tiempo, pero al menos tiene ahora una flamante licencia de matrimonio", dijo uno de los policías.