El móvil al parecer fue un pleito entre los varones.
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- La pasión se desbordó. La vida en común que por más de 15 años llevaban dos hombres, terminó en tragedia. Un pleito entre ambos ocasionó que uno de ellos degollara al otro y luego se cortara las venas terminando así con su vida. Sus cuerpos fueron encontrados 24 horas después de ocurridos los hechos.
El sangriento acontecimiento fue descubierto por familiares de uno de los occisos, cuando al ver que no respondía a sus telefonemas se trasladó hasta el domicilio donde la pareja vivía desde hace apenas tres o cuatro meses en esta ciudad, donde descubrieron la dantesca escena.
Fue a las 22:45 horas del pasado miércoles 21 de enero del año en curso, cuando familiares de José Méndez Orozco, de 68 años de edad, acudieron hasta la finca ubicada en privada Pípila número dos, interior uno, entre avenidas Hidalgo y Presidente Carranza, donde vivía con Antonio Zetina Gutiérrez, de 48 años, de origen guatemalteco.
Hacía aproximadamente 36 horas que hablaron con él la última vez, el martes por la mañana, por lo que los mantenía intrigados la falta de respuesta a sus telefonemas. Este fue el motivo por el que acudieron hasta el domicilio para ver qué ocurría.
Impactante hallazgo
Al no recibir contestación a los toquidos en la puerta, decidieron asomarse por un tragaluz que se halla en la parte superior de la vivienda, donde vieron con sorpresa que el piso estaba manchado con sangre.
Rápido dieron aviso a las autoridades competentes y en pocos minutos hizo su arribo personal del Ministerio Público encabezado por Liliana López de la Cruz, agente en turno así como de Servicios Periciales y la Policía Ministerial.
Hubo necesidad de forzar la cerradura de la puerta para tener acceso al pequeño departamento y una vez en su interior observaron que en la cocina el refrigerador estaba en el suelo.
En la recámara del fondo se encontró el cuerpo sin vida de José Méndez Orozco. Vestía su pijama y estaba boca arriba con las piernas colgando de la cama, en medio de un enorme charco de sangre. En el cuello se vio el enorme tajo que le segó la vida. Apenas comenzaba la pesadilla.
El piso mostraba el rastro sanguinolento que se dirigía al baño donde se encontró, al fondo en la regadera, el cuerpo de Antonio Zetina Gutiérrez. Sólo llevaba ropa interior.
También estaba en medio de un charco de sangre ya coagulado. Se le apreció un golpe en la yugular y sus muñecas mostraron los cortes por donde se le escapó la vida lentamente.
Un pleito, el motivo
Gerardo Antonio Pérez Pérez, titular de la Delegación Laguna I de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), dijo que el motivo de estos sangrientos acontecimientos, probablemente se debió a un pleito entre ambos varones.
Lo anterior se reafirma con las huellas de violencia encontradas en la escena del crimen. El refrigerador derribado, la cama revuelta así como el golpe en la yugular que presentó Antonio, son evidencias que no pasan por alto, dijo.
Una vez que con las correspondientes pruebas periciales se constató que fue Antonio quien dio muerte a José y luego se quitó la vida, se realizarán los trámites necesarios para extinguir cualquier acción legal, toda vez que el inculpado también falleció. Esto según el artículo 15 del Código Penal del Estado de Coahuila.
Como probable causa de muerte, se determinó shock hipovolémico en ambos, es decir, murieron desangrados.
Restauradores
José Méndez Orozco y Antonio Zetina Gutiérrez, tenían su domicilio en la capital del país y desde hacía tres o cuatro meses estaban en esta ciudad, pues se encargaban de restaurar los murales que están en el interior de lo que fue el cine Nazas, informó Gerardo Antonio Pérez Pérez, delegado de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
Durante todo ese tiempo se habían dedicado a restituir los colores de los grandes murales de lo que una vez fue una sala cinematográfica, llevando una vida tranquila y metódica según afirman los familiares de José, pues su rutina era su trabajo y su casa.
Fueron contratados por el Municipio, luego que adquirió el inmueble para cristalizar el proyecto del teatro Nazas, que será el escenario de los distintos eventos a realizar.
