LONDRES, (Reuters) - Los científicos de Australia han hallado una nueva especie de humano, del tamaño de un "hobbit", que vivió hace unos 18 mil años en una isla indonesia, un descubrimiento que agrega una pieza más al complejo rompecabezas de la evolución humana.
El esqueleto parcial del Homo floresiensis, hallado en una cueva en la isla de Flores, es el de una criatura femenina adulta que medía un metro de alto, tenía el cerebro del tamaño de un chimpancé y era sustancialmente diferente a los humanos modernos.
Compartía la alejada isla, al este de Java, con elefantes en miniatura y dragones de Komodo.
La criatura, que caminaba erguida, probablemente evolucionó en ese tamaño pequeño debido a las condiciones ambientales y coexistió con los humanos modernos en la región durante miles de años.
"Es un hallazgo extraordinariamente importante", dijo el profesor Chris Stringer, del Museo de Historia Natural de Londres, en una conferencia de prensa el miércoles. "Desafía la idea de qué es lo que nos hace humanos".
Peter Brown, de la Universidad de Nueva Inglaterra en Armindale, Australia, y sus colegas fueron los que hicieron el descubrimiento del cráneo y de otros huesos -además de herramientas en miniatura- en septiembre del 2003 cuando buscaban registros de la migración humana moderna a Asia.
Leyendas
Las leyendas locales dicen que hace tiempo en las islas vivían criaturas parecidas a los hobbits, los seres de la saga de "El Señor de los Anillos" parecidos a los gnomos. Pero nunca hubo evidencia de ellos.
Los homininos, subfamilia de los homínidos que incluye a los humanos y los prehumanos, se distanciaron de la línea de los chimpancés hace unos 7 millones de años. Los primeros homininos africanos caminaban erguidos, eran pequeños y tenían cerebros muy chicos.
Se cree que la nueva especie, llamada "Hombre de Flores", desciende del Homo erectus, que tenía un cerebro grande, el tamaño de un humano moderno y se extendió desde Africa a Asia hace unos 2 millones de años.
La nueva especie quedó aislada en Flores y evolucionó en su forma enana para adecuarse a las condiciones, como la escasez de alimentos.
En Flores, que probablemente nunca estuvo conectada al continente, vivía una variedad de criaturas exóticas, como una versión enana del elefante primitivo Stegodon.
Brown y sus colegas han encontrado los restos de otros siete individuos enanos en el mismo sitio, desde el primer hallazgo.
Incógnitas
La criatura habría vivido al mismo tiempo que el Homo Sapiens, antepasado de los humanos.
El Homo Floresiensis sería, pues, la segunda especie humana que se conoce que habría vivido junto a nuestros antepasados, pero más recientemente, hace unos 18 mil años.
El hallazgo plantea muchas preguntas. Se cree que el homínido podría ser un descendiente del Homo Erectus, que ya conocía el fuego y utilizaba herramientas, y que habría tenido que cruzar el mar para llegar a la isla. El problema es que no hay constancia de que supiera construir embarcaciones.
Otra incógnita es el tamaño del cerebro del Homo Floresiensis, que, con 380 milímetros, es más pequeño que el de un chimpancé.
Los expertos pensaban que el cerebro humano debía tener un tamaño mínimo, pero la criatura hallada, pese a tener ese cerebro encogido, parece haber sido un ser inteligente.
Los científicos intentarán ahora extraer muestras de ADN para averiguar más detalles sobre esos habitantes de Flores, una isla donde también se han encontrado restos de animales prehistóricos únicos.