GÓMEZ PALACIO, DGO.- La Jurisdicción Sanitaria Número Dos advierte sobre la importancia del manejo de los insecticidas, sobre todo aquellos que no tienen la leyenda de la clasificación del antídoto que lo componen.
El titular de esta institución médica, José Salomón Olvera Leyva, informó que este tipo de veneno para controlar la presencia de cucarachas, moscas y roedores en las casas, no es la solución. El producto mata a las que andan caminando, pero no las que están en proceso de reproducción.
La limpieza es la clave. Hay que evitar dejar residuos de comida en la cocina o en otras áreas de la casa, para impedir que la cucaracha voladora prolifere, es conveniente sellar las tapas de los registros. Inclusive la fumigación no es tan efectiva, cuando se deja alimento a la intemperie y al alcance de estos insectos.
“Cuantas cucarachas quieras tener, cuantas cucarachas puedas mantener”, expresa Olvera Leyva para referir que si no se limpia diariamente la estufa y se dejan residuos de comida proliferarán. Si los trastes no se lavan y se dejan dos o tres días en el fregadero, es probable que también abunden en las casas.
Recomendó poner la basura en bolsas y cerrarlas para evitar la presencia de estos insectos. “Si se dejan por ahí, no sólo las cucarachas abundarán, sino también las moscas y los ratones”. Los insectos necesitan la materia orgánica y ahí depositan los huevecillos.
Manifestó que los registros no deben estar cerca de las cocinas. Su lugar es en los patios. “Pero hay construcciones que las hicieron como Dios les dio licencia y están saliendo de esta área de la casa, por esa razón las cucarachas abundan en ese lugar”.
Los drenajes son el lugar propicio para estos parásitos. Son bichos que resisten altas temperaturas, la congelación y hasta la radiación. Son los más antiguos del mismo. Inclusive podrá desaparecer la humanidad y estos continuarán.
Los insecticidas no son la solución, insiste para luego manifestar que en el mercado hay muchas clases y no se conoce la sustancia que contienen y el antídoto que prevalece, “ese es el problema, porque muchos son más tóxicos que otros”.
En las casas no se toman las medidas adecuadas cuando aplican los insecticidas y quienes la habitan están respirándolos. La sustancia se fija en el tejido graso y en el cerebro y pueden pasar muchos años para que el cuerpo elimine el tóxico.
Recomendaciones
El titular de la Jurisdicción Sanitaria número Dos advirtió sobre el uso del llamado gis chino para matar las cucarachas y otros insectos, porque no se conoce el antídoto que lo contiene.
Dice que en su momento esta institución advirtió sobre la utilización de este producto, porque no es nacional y las leyendas que vienen en la caja están en otro idioma. Inclusive fue decomisado por Regulación Sanitaria.
Existen muchos insecticidas en el mercado, hay de varios colores. Unos son más tóxicos que otros y se específica cuál es el antídoto. El problema con el gis es que se desconoce qué sustancia lo compone. “Si la gente lo profiere, es recomendable que no lo toque con las manos, que utilice guantes y procure no inhalar el polvo que suelta cuando se aplica”.