SYDNEY, (Reuters) - Científicos australianos han descubierto lo que hombres y mujeres deportistas de todo el mundo han sabido por años: las bananas son una gran fuente de energía instantánea.
Un nuevo estudio financiado por el gobierno australiano está investigando la posibilidad de aprovechar bananas magulladas o arruinadas - que no se pueden vender a los consumidores- para proveer energía a 500 hogares.
"No es un engaño", dijo el director general del Consejo de Cultivo de Bananas, Tony Heidrich.
Con el recuerdo de la ciudad que funcionaba con energía de cerdos en la película futurística "Mad Max Thunderdome", las bananas se combinarían con bacterias para producir metano.
Mediante tuberías se llevaría el gas a una turbina que podría estar conectada a la red eléctrica principal.
"Es como un gran estómago. Se abre la tapa, se introduce el material, se sella la tapa (...) y listo", dijo Heidrich por teléfono desde Queensland, el estado productor de bananas de Australia.
"Esencialmente es como un gran cubo de abono. (Esas bananas) son un producto de desperdicio y actualmente no estamos haciendo otra cosa con ellas. Esto aprovecharía la capacidad eléctrica que pueden producir", dijo Heidrich.
Sin embargo, Heidrich dijo que hogares con energía de otras frutas, como el albaricoque, la piña y el kiwi, eran poco probables en el corto tiempo.
"Inicialmente creo que se limitarán al uso de bananas pero potencialmente se podría usar otra fruta", dijo Heidrich.
El etanol de la caña de azucar ya ha sido probado para el uso de energía comercial y las cáscaras de las nueces macadamia australianas han sido utilizados como combustible para producir electricidad.
