Las mentadas reglas que un grupo de siete gobernadores propone se implanten dentro del Partido Revolucionario Institucional, tanto para impulsar una contienda interna equitativa, dicen, como para postular un precandidato común que busque la nominación presidencial, a juicio de este columnista, lleva consigo la construcción de un patíbulo de cartón con el que no esconden sus intenciones de querer trepar al actual presidente del CEN, Roberto Madrazo Pintado, para ponerle una soga al cuello o cuando menos un ronzal. Lo grave de este asunto es que hay una evidente rebeldía de quienes han demostrado que no quieren al tabasqueño por motivos personales pues les estorba, considerando que si dejan pasar el tiempo nadie lo va a parar dado que está cimentando su fuerza con los triunfos que ha obtenido en la mayoría de las entidades federativas. A mayor razón ahora que el Tribunal Federal Electoral acaba de fallar en la disputa por Veracruz y Oaxaca a favor del tricolor y nos daremos cuenta que este asunto se está poniendo de color de hormiga para los mandatarios insurrectos.
Los enemigos políticos de Madrazo lo han acosado con pretextos diversos queriendo evitar que pueda figurar en la contienda a celebrarse en 2006. Pero más que nada para que deje su lugar a uno de los gobernadores disidentes quien aparenta pretender la candidatura a Presidente cuando en la realidad quiere dirigir el proceso considerando que por su juventud puede esperar para 2012.
No se sabe si le tienen miedo a Madrazo o de plano les cae gordo o no hay química o simplemente no son del mismo equipo. Lo único cierto es que tratan de impedir a cualquier costo que llegue a la liza final dentro de su organización política.
El actual líder del PRI ha demostrado ser un aguerrido soldado que ha estado en el frente de batalla en momentos difíciles, sin que se haya visto que se arredre ante los peligros. Puede decirse que es más terco que una mula cuando se propone alcanzar un objetivo, va siempre adelante navegando contra viento y marea. En esto de la política es, en lenguaje coloquial, una chucha cuerera, que se las sabe de todas, todas.
Hoy los siete gobernadores no ocultan que el futuro proceso electoral de 2006 se ha constituido ya en la manzana de la discordia. Llama la atención que sean siete los amotinados dado que es un número cabalístico, fatídico, fatal. Veamos. Las siete musas, las siete maravillas del mundo antiguo, los siete sabios de Grecia, los siete pecados capitales y siete pecados veniales, los seis días en que Dios creó al mundo, descansando el séptimo, en siete colinas surgió la ciudad de Roma, son siete las notas musicales donde se ha concentrado la armonía de toda la naturaleza, las siete vacas gordas y siete flacas en el sueño bíblico del Faraón, los siete dones del Espíritu Santo, las siete palabras de Jesús, los siete colores del Arco Iris, los siete enanos de Blanca Nieves, etcétera. En fin, el destino y la fortuna son dos vocablos de siete letras cada uno. ¿Cuál es el significado oculto del número siete? ¿Tiene un valor sobrenatural? No lo sé, pero sí presiento que en el fondo hay algo profundo y misterioso. Las virtudes teologales son tres: Fe, Esperanza y Caridad y las cardinales son cuatro: Fortaleza, Templanza, Justicia y Prudencia, es decir, siete en total. ¿Los siete gobernadores, aplicando la hermenéutica, son simples protagonistas de fuerzas oscuras en que su intervención estaba escrita desde el principio de los tiempos? A propósito, ¿quién de los siete será Estornudón?, ¿quién Tontín?, ¿cuál Dormilón?, ¿Feliz?, ¿Doc? o ¿Timidón? creo tan sólo reconocer, de entre ellos, a Gruñón. Por otra parte, debo decir con seguridad que Roberto Madrazo Pintado no es Blanca Nieves. La del cuento del alemán Guillermo Grimm (1786-1859) era una hermosa criatura.
Los mandatarios indican que hay el riesgo de que la unión partidista se fracture. Bueno, debo decir que desde hace rato el partido que creó Plutarco Elías Calles sufre de constantes quebrantos. Sin hipérboles ni tapujos estos mandatarios, al manifestar su deseo de que Roberto Madrazo Pintado se vaya de la dirección del partido, están dando paso a la ruptura. No le busquen tres pies al gato, queda claro que la desesperación está provocando una lucha intestina protagonizada por grupos que quieren el poder. En la reunión que sostuvieron los siete gobernadores con el presidente nacional del tricolor, les dijo muy serio que no hay dados cargados para nadie, que cuando sean los tiempos todos los aspirantes priistas deberán renunciar, a cualquier cargo público, para garantizar certeza y equidad en el proceso interno de selección, destacando que en su momento la petición de los siete, será turnada a la Comisión Nacional de Procesos Internos, con lo que, no hay duda, los mandó a sus ínsulas con la cola entre las piernas...
