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MÉXICO, DF.- En su segunda presentación, Luis Miguel dejó claro que su creatividad no es mucha y aunque tuvo acercamientos con su público, al que se atrevió a saludar de mano en algunas ocasiones, las frases que dirigió al público el viernes, fueron las mismas que en su primer concierto.
Entre las personalidades que se dieron cita para la segunda fecha de "El Sol" se pudo observar a Laura Zapata, quien acompañada por su familia disfrutó de la actuación del cantante mexicano.
Nuevamente, Luis Miguel apareció en el escenario vestido con camisa blanca, traje y corbata negra, y durante el concierto cambió de vestuario a un atuendo completamente negro.
Sus frases con el público fueron las mismas, agradeció la asistencia del público en la primera, en la segunda afirmó que su padre le motivó a grabar algunas canciones durante su adolescencia e hizo público su agradecimiento por haberlo ayudado en ese momento.
Aunque con público diferente, pareciera que es el mismo, ya que en ningún momento las gargantas femeninas dejaron de esbozar gritos de frenesí ante el menor movimiento del intérprete.
Como una maquinaria perfecta, Luis Miguel ejecuta sus temas, para ofrecer tan sólo 100 minutos de presentación nuevamente.
A pesar de las 21 fechas que ofrecerá en el Auditorio Nacional, aún existen localidades del primer y segundo piso para la mayoría de las presentaciones.
Paga caro su comodidad
Cuando de comodidad se trata, el cantante mexicano Luis Miguel no escatima esfuerzos. Ni para él ni para el equipo que lo acompaña.
Resulta que para estar lo más cómodo posible durante su permanencia en Ciudad de México, donde ofrecerá varios conciertos, ?El Sol? alquiló la suite presidencial de un famoso hotel. Por ella paga, nada más y nada menos, que mil dólares por noche.
La estancia en cuestión tiene dos habitaciones, cocina, sala, estudio para doce personas, dos baños, jacuzzi y acceso directo al helipuerto del hotel. La habitación principal tiene cama king size (2x2) y cuenta con vista al bosque de Chapultepec.
?Luismi? también reservó 50 habitaciones, más sencillas eso sí, para su personal técnico y coristas.