Malbéne acaba de publicar un artículo en la revista "Kultur und Ethik", de Berlín. Ahí dice lo siguiente:
"El más hondo misterio del cristianismo, y su más grande aportación, consiste en la idea de que Dios se hizo hombre. Así, no podemos llegar a Dios sólo con la abstracta idea de Dios: únicamente lo alcanzaremos a través de aquellos por cuya salvación vino a la tierra. Cada uno de nosotros, por lo tanto, es nadie sin 'el otro'. Sin él de nada sirve nuestra fe. Ni aun Dios mismo puede salvarnos si en la obra de nuestra salvación no contemplamos el rostro de nuestro prójimo...".
Esta idea de la salvación a través de "el otro" ha escandalizado a muchos teólogos. Pero eso no perturba a Malbéne. Dice: "Escandalizarse es casi una obligación profesional del teólogo".
¡Hasta mañana!...