Al menos una veintena de estudiantes de la Facultad de Derecho acudieron a las oficinas de la Procuraduría General de Justicia para protestar por la falta de actuación en una denuncia interpuesta desde principios del presente mes en contra de un sujeto que agredió a uno de sus compañeros. Manifestaron que, como era influyente, la corporación mantenía congelada la averiguación.
Ayer al mediodía, decenas de estudiantes de la referida institución llegaron a las instalaciones para solicitar una entrevista con algún funcionario a quien deseaban enterar de las anomalías que presuntamente se estaban registrando en una de las mesas, donde el agente del Ministerio Público había dado carpetazo a una denuncia por lesiones en agravio de Ubaldo Barrientos.
El lesionado el día cuatro de los corrientes sufrió varias heridas cortantes en brazos y manos, causadas por Sergio Ganot, sujeto que minutos antes del altercado le echó la camioneta encima a Ubaldo, que en esos momentos tripulaba una motocicleta de su propiedad.
En respuesta, Sergio bajó del vehículo navaja en mano y comenzó a herir al motociclista. Antes de huir, el agresor amenazó de muerte a su víctima, señalándole que si no se calmaba alguien lo iba a llorar en su hogar.
Dos días después, el afectado interpuso formal denuncia y fue turnada. Confiado en que la justicia actuaría, pasaron los días y nunca vio respuesta alguna a la fecha.
Por ello, los estudiantes en apoyo, después de unos minutos de espera, fueron recibidos por el subprocurador de Justicia, Oliverio Reza Cuéllar, funcionario que señaló que la averiguación carecía de elementos suficientes para proceder contra el presunto agresor, por ello el fiscal que conoció de la causa estaba integrando la averiguación.
Instó a los presentes a la calma y asumió el compromiso de vigilar la situación del procedimiento, señalando que no existía ninguna parcialidad hacia nadie. Por ello, si existían elementos, se procedería en consecuencia contra el o los culpables.