MÉXICO, DF.- Maribel Domínguez, goleadora de la selección mexicana femenil de futbol, llegó a un acuerdo para jugar con el club Celaya de la Primera División A y sólo espera el aval de la FIFA para debutar en el Torneo Clausura 2005, un campeonato jugado hasta ahora por hombres.
La futbolista y el presidente del club Alberto García hicieron público el arreglo, lo que sería un hecho histórico, pues en todo el mundo una mujer no ha incursionado oficialmente en una liga varonil.
El reglamento de la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) y de la Federación Mexicana de Futbol (FMF) no aborda la posibilidad de que una mujer sea contratada por un club profesional, sin embargo la FMF no dará su aval sin el consentimiento del organismo internacional, aunque su presidente Alberto de la Torre opina que no ve problema alguno en que se dé la contratación.
Maribel Domínguez ha jugado profesionalmente en las ligas femeniles de Estados Unidos y en mundiales y olimpiadas con la selección mexicana femenil. La delantera fue incluida por la FIFA entre las 25 mejores futbolistas del año y candidata al premio de mejor jugadora de 2004.
Faitelson apoya a Domínguez
La jugadora Maribel Domínguez tiene todo el derecho de buscar una oportunidad para jugar futbol a nivel profesional, incluso en ligas que hasta ahora han sido exclusivas de hombres, opinó David Faitelson, comentarista deportivo de TV Azteca.
"Maribel debe intentar jugar y hacerlo donde pueda", comentó Faitelson, al tiempo que subrayó el hecho de que las mujeres mexicanas han estado impedidas de practicar futbol en el más alto nivel, porque no existe una liga profesional femenil de esta disciplina.
En estas condiciones, observó, sería discriminatorio prohibirle a ella, lo mismo que a cualquier otra mujer que trabaje y se gane la vida haciendo lo que más le guste, o lo que mejor le parezca.
"Y tendrá que hacerlo en un medio dominado por hombres... porque no tiene otra opción", argumentó.
Consideró el discípulo de José Ramón Fernández en el programa "Los Protagonistas" que si física y técnicamente puede jugar, tiene el mismo derecho que cualquier hombre de hacerlo, aunque claro, "si destaca o no en función de sus cualidades, ese ya es otro problema".
"Ya en la cancha debe demostrar que es apta para el deporte y que tiene condiciones para competir", añadió.
En su experiencia, Faitelson mencionó que tiene tres hijas y que a una de ellas le gusta el futbol y lo practica en ligas de hombres.
"Tiene riesgos, pero si ella quiere permanecer en este deporte debe reunir cualidades físicas y técnicas para lograrlo. Entonces, si consideramos que no puede, que está en desventaja o que es peligroso, ya enfocará sus baterías en otra dirección", señaló.
Lamentó que no exista en México desarrollo de deportes de conjunto para mujeres, y peor aun, que ni siquiera se vislumbren posibilidades de que se constituyan ligas profesionales de futbol o beisbol para féminas.
"Y la paradoja, agregó, es que esto sucede en un país en el que las máximas atletas internacionales son mujeres (Ana Guevara, Lorena Ochoa, Belem Guerrero)... todas ellas destacadas deportistas, pero en disciplinas individuales".
Faitelson concluyó con una reflexión dicha en el mismo tono en el que lanza sus editoriales en la televisión: "Maribel Domínguez tiene que hacerlo... debe hacerlo... porque no tiene otra opción".
La goleadora de la selección mexicana femenil de futbol llegó a un acuerdo para jugar con el club Celaya de Primera División A y sólo espera el consentimiento de la FIFA para debutar en el torneo de Clausura 2005, un campeonato jugado hasta ahora sólo por hombres.
