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MÉXICO, DF.- Más de mil 500 seguidores de las gemelas estadounidenses Mary Kate y Ashley Olsen asistieron desilusionados a la premier de la película Un Instante en Nueva York (New York Minute), tras saber que ninguna de sus protagonistas estaría presente como se había informado con anterioridad.
A finales de junio pasado portavoces de la distribuidora Warner Bros. informaron que Mary Kate Olsen no asistiría a la primera función en México debido a que sufría de un trastorno alimenticio, que debía atender en calidad de "urgente" dentro de una clínica especializada.
No obstante, afirmaron que su hermana Ashley atendería con la prensa, previo al estreno nacional, las cuestiones relacionadas con la filmación de la película.
Asimismo, prometieron que la joven de 18 años de edad desfilaría por la tradicional "alfombra roja" para convivir de manera breve con su público y presentar la producción cinematográfica que estelariza bajo la dirección de Dennie Gordon.
Sin embargo, los proyectos se vinieron abajo luego de que a "última hora" la afamada actriz también canceló su llegada a este país, bajo el argumento de "motivos de logística".
Además se dijo que "los publicistas prefirieron no arriesgar a Ashley con preguntas sobre la salud de su gemela".
Por tal razón los invitados especiales arribaron la víspera con aparente decepción a la premier que se exhibió en un conocido complejo cinematográfico del rumbo de Santa Fe, que proyectó la cinta en 10 salas.
En entrevista, los cinéfilos manifestaron su descontento por la ausencia de sus artistas favoritas; aun así auguraron que el filme Un Instante en Nueva York alcanzará en este país un éxito sin precedentes.
Aprovecharon también para enviar sinceros saludos a las actrices, y esperan la pronta recuperación de Mary Kate Olsen, de quien se dice, padece de anorexia.
Un Instante en Nueva York narra las aventuras de las hermanas Jane y Roxanne Ryan, de 17 años, quienes viajan juntas a regañadientes desde su casa en Long Island hasta Nueva York.
Jane, magnífica estudiante, dará un discurso para conseguir una beca universitaria de gran prestigio para estudiar en el extranjero.
En tanto, la despreocupada y rebelde Roxanne espera poder filtrarse al rodaje de un video musical "underground" y pasar su cinta de demostración al grupo.
Pero los planes de Roxy y Jane fracasan cuando una confusión las hace aterrizar en medio de una sospechosa transacción de mercado negro.
Perseguidas por un agente irresponsable y acusadas de raptar al perro de una senadora, las Ryan deben encontrar una manera de actuar juntas para burlar a las fuerzas que amenazan con poner en peligro los sueños universitarios de Jane y enviar a "Roxy" a un convento de monjas.
Un Instante en Nueva York, que cuenta también con las actuaciones de Eugene Levy, Andy Richter y Jared Padaleckique se estrenará el próximo 23 de julio en las principales salas del país.
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¿Niñas perfectas?
Uno de los secretos del éxito de las gemelas Olsen es la imagen limpia que ofrecen y que garantiza la aprobación de los padres: “No somos rebeldes, no tratamos de ser alguien que no somos”, explica Ashley. Thorne vela para que el público las perciba como niñas perfectas. No salen de fiesta, son aplicadas, trabajan duro y son respetuosas con sus progenitores. Pero, ¿lo son? “Nadie es perfecto”, apunta Mary-Kate. “Sólo somos seres humanos”, continúa. La revista Star hizo énfasis en dicha humanidad cuando publicó una fotografía de ellas en una fiesta; estaban rodeadas de botellas de cerveza, aunque no sostenían ninguna. Era la confirmación de que eran pecadoras. Beben y se divierten.
En cuanto a índoles del corazón, ya han dado sus primeros pasos. A principios de mayo People confirmaba la relación de Mary-Kate con el hijo de Jeffrey Katzenberg, uno de los socios de Dreamworks –el estudio propiedad de Steven Spielberg– 15 días después, se anunciaba su ruptura. Luego la misma revista confesaba que Ashey, habría perdido la virginidad.
El último escándalo de las gemelas es que Mary-Kate –la más competitiva de las dos– acaba de ingresar en una clínica para un tratamiento intensivo de un mes para curar lo que la revista US Weekly llama anorexia. Estos percances han marcado un punto de inflexión en sus carreras. Para empezar se han matriculado en la Universidad de Nueva York. Ashley pasará los próximos años estudiando Psicología y Mary-Kate, la más bohemia de las dos, dedicará sus horas de aprendizaje a la fotografía y muy probablemente a las artes culinarias.
Las malas lenguas dicen que su decisión de seguir una educación universitaria se debe –además de alejarse de la prensa– a las dudas de cómo enfocar profesionalmente su vida de adultas. Pero lo cierto es que estas gemelas de oro, no tienen de que preocuparse, ya que tienen todo el dinero para pasársela bien.
