Entre los 16 muertos había al menos nueve civiles, siete de los cuales eran extranjeros. Se teme por la vida de varios rehenes .
KHOBAR, Arabia Saudita, (Reuters) - Extremistas islámicos vinculados con la red Al Qaeda mataron el sábado al menos a 16 personas en la ciudad de Khobar, en el este de Arabia Saudita, dijeron fuentes de seguridad.
Las fuentes agregaron que entre los muertos había al menos nueve civiles, siete de los cuales eran extranjeros, y siete miembros de las fuerzas de seguridad sauditas.
Añadieron que entre los fallecidos hay un estadounidense, un británico, dos filipinos, un indio, un pakistaní y un egipcio, este último un niño de diez años.
Todos ellos vivían en alguno de los complejos residenciales de los que habitualmente se reservan para los extranjeros que trabajan en Arabia Saudí.
Otro grupo de atacantes tomaron como rehenes a una veintena de personas, de los que buena parte eran libaneses pero los fueron soltando poco a poco antes de ser neutralizado por la policía, sin que se sepa qué ha sucedido con los captores.
Toman rehenes
Los terroristas mantienen como rehenes a medio centenar de personas, según testigos presenciales.
Poco antes del asalto, las fuerzas especiales y los terroristas habían intercambiado disparos a la entrada del complejo Al Sanaa, adonde los rehenes habían sido trasladados tras ser primero secuestrados en el complejo vecino de El Oasis.
Se ignora la nacionalidad de los rehenes, de los que ya ha habido un grupo de cinco, todos ellos libaneses, que los terroristas han consentido liberar poco antes.
Reivindica Al Qaeda atentado
Un comunicado del Ministerio saudita del Interior confirmó que combatientes islamistas irrumpieron el sábado en cuatro complejos habitados por extranjeros en la ciudad de Khobar, en el este de Arabia Saudita, para realizar su ataque.
También, un supuesto comunicado del grupo terrorista Al Qaeda apareció en sitios islámicos de la web, reclamando la autoría de los hechos.
El grupo, acusado por los ataques del 11 de setiembre de 2001 ha jurado desestabilizar la monarquía saudita, aliada de Estados Unidos.
Arabia Saudita es el mayor productor mundial de petróleo.
Khobar se encuentra a sólo diez kilómetros de Dahrán, uno de los mayores centros petroleros del país, en la costa del Golfo Pérsico y frente a la isla de Bahrein.
Tanto en Khobarcomo en Dahran viven numerosos extranjeros, la mayoría de ellos occidentales, que trabajan en empresas petroleras o de otra clase.
Los complejos residenciales donde viven estos extranjeros han sido objeto de ataques terroristas en varias ocasiones en los últimos doce meses, tiempo en el que las fuerzas de orden saudíes han desmantelado numerosas células terroristas de corte extremista religioso.
El ataque, aparentemente dirigido a la industria petrolera saudita, se registró dos días después de que el líder de Al Qaeda en el país emitiera un plan de lucha basado en la guerrilla urbana, especificando los pasos que los combatientes deben tomar para triunfar en su campaña para derrocar a la familia real.
Este fue el tercer ataque contra extranjeros en menos de un mes en la cuna del Islam y sede de varios de sus sitios sagrados más importantes.
Según dijeron las fuentes, los combatientes abrieron fuego contra el edificio Al-Khobar Petroleum Center, que alberga las oficinas de las mayores compañías petroleras occidentales, antes de irrumpir en tres complejos de oficinas y en las viviendas de los empleados que allí trabajan.
Los atacantes, que serían cinco, se dirigieron entonces a los complejos habitacionales Rami y Oasis, y en este último mantendrían a los rehenes.
Varios empleados que trabajan para las petroleras Shell
La agencia oficial de noticias de Líbano dijo que cinco ciudadanos libaneses estaban entre los rehenes.
"El embajador libanés en Arabia Saudita dijo que los atacantes tomaron varios rehenes, incluyendo cinco libaneses", informó la Agencia Nacional de Noticias.
No dio mayores detalles, pero un ejecutivo de la industria petrolera dijo que dos de los libaneses tenían pasaporte estadounidense.
"Esto es claramente un ataque al sector petrolífero", dijo un alto ejecutivo occidental en la capital saudita, Riyad.
"Los atacantes todavía están sueltos. La gente se queda en sus casas, cuidándose. Nadie puede dar una cifra final de muertos", dijo a Reuters un diplomático occidental.
Algunos testigos dijeron que dos autos con insignas militares ingresaron al complejo Apicorp, donde según sus dichos, un niño de 9 años y un egipcio habrían muerto por los disparos.
