BOSTON, EU.- Miles de fanáticos bloquearon numerosas calles del centro de la ciudad de Boston, en el desfile de celebración del equipo de los Medias Rojas, que consiguió coronarse campeón del beisbol profesional de las grandes ligas, tras más de ocho décadas.
El equipo de Boston, que ganó después de 86 años el título, al vencer por 4-0, en un serie a siete partidos, a los Cardenales de San Luis, en la 100 edición del "clásico de otoño" del beisbol profesional de la gran carpa, realizó un recorrido que comenzó en las inmediaciones del mítico Fenway Park y que se extendió durante más de tres millas, acabando en el río Charles de la ciudad.
La cantidad de fanáticos congregados, que según proyecciones del estado podrían haber sobrepasado los cuatro millones de personas, saludaban y trataban de acercarse a los jugadores mientras pasaban en la caravana, expresando su alegría y agradecimiento por haber terminado con muchos años de angustias y decepciones y hasta con supuestas maldiciones.
"Toda esta gente ha esperado toda su vida, cada año diciendo, éste sí es el año, este sí es el año", comentó John Hendry, dueño del equipo de los Medias Rojas, "Y por fin, 2004 sí fue nuestro año, pero esperamos que no sea el último, o por lo menos que no tengan que pasar otros 80 para volver a celebrar".
Después de haber estado a tan sólo tres outs de quedar eliminados en la serie de campeonato de la Liga Americana por los Yanquis de Nueva York, los Medias Rojas comenzaron una remontada histórica que los llevó a ganar ocho partidos consecutivos y a ser los nuevos campeones del mundo.
Los Medias Rojas con su remontada ante los Yanquis y barrida de 4-0 ante los Cardenales, primera desde 1999 cuando los Mulos del Bronx lo hicieron ante los Bravos de Atlanta, terminaron además con la supuesta "maldición" del bambino Babe Ruth, que al parecer los había perseguido durante décadas.
La venta, en 1920, de Ruth a los Yanquis, después de haber ganado en 1918 la Serie Mundial, fue lo que generó la ya famosa y frustrante "maldición" del bambino de oro, que quedó enterrada para siempre en el Busch Stadium de San Luis, el pasado miércoles, por la noche.
"Cualquier fanático de los Medias Rojas puede caminar tranquilo en el Yankee Stadium con la cabeza en alto", comentó el receptor de los Medias Rojas, Jason Varitek.
De todas formas y a pesar de que la celebración y desfile han transcurrido con normalidad, el departamento de policía ya hizo oficial una lista de arrestos, que asciende a diez individuos, por conducta inapropiada, además de que 12 personas han tenido que ser trasladadas a hospitales de la localidad y otras 30 ya han sido tratadas en los centros asistenciales que tienen a lo largo del recorrido.
Martínez resulta golpeado por una pelota en las celebraciones
El abridor dominicano de los Medias Rojas de Boston, Pedro Martínez, resultó golpeado por una pelota en la frente, durante las celebraciones del equipo y su legión de aficionados, que consiguieron después de más de ocho décadas, coronarse nuevamente como campeones mundiales del beisbol profesional de las grandes ligas.
Al parecer Martínez fue alcanzado por la pelota cuando se encontraba en un bote en el río Charles de la ciudad de Boston y a pocos minutos de dar por concluido el desfile de celebración de los Medias Rojas.
El desfile, que comenzó a las diez de la mañana en el legendario Fenway Park, se extendió algunas horas más de lo inicialmente planeado, luego de que los jugadores del equipo de Boston ya habían recorrido más de tres millas, en un trayecto que los llevó por las calles más emblemáticas de la ciudad.
"Tengo un pequeño dolor de cabeza", comentó Martínez luego del incidente, "pero aparte de eso me siento bastante bien".
La pelota, que fue lanzada por un sujeto que todavía no ha sido identificado, estuvo a punto de ser atajada sin suerte por el lanzador Derek Lowe, compañero de Martínez en el equipo.
"Vi cómo la pelota le pegó a Martínez en la cabeza", explicó uno de los aficionados que observaron el incidente, "Lowe trató de agarrarla, pero no pudo y la pelota le pegó en la cabeza a Martínez y luego rebotó y cayó al fondo del río".
Schilling pasará por el quirófano el próximo miércoles
El estelar abridor de los Medias Rojas de Boston, Curt Schilling, pasará por el quirófano el próximo miércoles, para reparar la lesión que presenta en su tobillo derecho.
El doctor del equipo, Bill Morgan, explicó, minutos antes al inicio del desfile de celebración de los Medias Rojas por las calles de la ciudad de Boston y donde Schilling estuvo presente, que el lanzador derecho será vuelto a chequear el lunes y si no se observa ningún tipo de infección en la zona afectada, se procederá con la operación.
"Si fuera por él ya se hubiera operado hace algunos días", comentó Morgan, "Hasta ahora todo indica que la operación tendrá lugar el próximo miércoles, pero todavía quedan algunos rastros de infección, por lo que tendremos que esperar un poco más para dar con una decisión y solución definitiva".
Schilling, que estuvo a punto de perderse la postemporada y la posibilidad de estar presente en la Serie Mundial, luego de sufrir una lesión en uno de los tendones del tobillo, que se le agravó en el primer partido ante los Yanquis de Nueva York en la serie por el campeonato de la Liga Americana, se encuentra ansioso por pasar por el quirófano, para de una vez por todas comenzar con su proceso de recuperación.
"Esperemos que el miércoles sea el día en que por fin arreglemos este problema", subrayó Schilling, "Ahora lo único que me preocupa es tratar de recuperarme completamente, para estar en mis mejores condiciones físicas en la próxima pretemporada".
