SUN-AEE
LOS ÁNGELES, EU.- Brutal, pero visualmente impecable, resulta la cinta La Pasión de Cristo, que fue proyectada ayer a representantes de la prensa internacional que se encuentran en esta ciudad para entrevistar a los protagonistas de esta versión de las últimas 12 horas de la vida de Jesucristo, que coescribió, produjo, dirigió y financió Mel Gibson.
La polémica cinta, que dura poco más de 120 minutos y será estrenada en México el próximo 26 de marzo, comienza durante la noche en que Jesús (Jim Caviezel) reza y llora solitario en el huerto de Getsemaní y deja su suerte en manos de Dios, antes de ser arrestado.
Angustiado y triste, según el guión en que colaboró Benedict Fitzgerald, Jesús es visitado por Satán en forma de mujer (un personaje que se presenta en momentos clave de la cinta), quien le dice que ningún hombre puede soportar todos los pecados del mundo, pero él resiste la tentación y se enfrenta a su destino.
La violencia explícita, que tanta controversia ha generado antes de su estreno en Estados Unidos el 25 de febrero, tiene uno de sus primeros ejemplos en la secuencia en la que el hijo de Dios es golpeado por los soldados que lo conducen ante los fariseos y casi lo estrangulan cuando lo dejan caer encadenado a una barranca, precisamente en Getsemani.
Hablada por completo en arameo (en el caso de los personajes judíos) y latín vulgar (en el de los romanos), la cinta filmada en Italia provocó reacciones de sobresalto entre quienes asistieron a la proyección en los estudios Sony (donde se realizó la mezcla de sonido de la película), por la crudeza de las imágenes posteriores.
Si bien la violencia contra Jesús es foco principal de atención, las escenas en que Judas se arrepiente de haberlo vendido también son impresionantes: antes de suicidarse, es perseguido por niños que toman forma de demonios. Calificada como "antisemita", porque presuntamente muestra a los judíos como los asesinos de Cristo, la película no incluye la escena en que el sacerdote Caifás decía: "Que su sangre caiga sobre nosotros", cuando exige la crucifixión de Jesús, al menos en esta versión mostrada a la prensa.
Llegado el momento de la flagelación, castigo que le impone Poncio Pilatos (encarnado por el búlgaro Hristo Naumov y que no luce despiadado, sino temeroso), no hay concesiones al mostrar la brutalidad de los soldados romanos, que sujetan a Jesús a un pilar y descargan sobre su cuerpo desnudo más de los bíblicos 40 golpes, con azotes que terminan en filosos artefactos que le desgarran la piel y la carne.
Si bien existen momentos de conmovedora belleza, como los "flashbacks" en los que Jesús recuerda aspectos de su infancia con su madre (interpretada por la rumana Maia Morgenstern), su entrada a Jerusalén, su encuentro con María Magdalena (a quien da vida la italiana Monica Bellucci) y la última cena, la ruta hacia la crucifixión deja al espectador impávido.
El martilleo de cada clavo en las manos de Jesús sangrante de la cabeza a los pies se ve en tomas cerradas, y su brazo derecho es roto para que llegue al lugar donde tiene que ser clavado.
Una metáfora del llanto de Dios toma forma en una única gota que cae del cielo al momento de la muerte del hijo de María.
La pasión, de Gibson, quien sólo se reunió con la prensa local, termina cuando Jesús resucita y sale del santo sepulcro.
Busca reevaluar la vida
Mel Gibson asegura que la necesidad de reevaluar su vida lo condujo a realizar la película The Passion of Christ.
-"Me han ofrecido todos los excesos que vienen con el dinero y la fama y no me satisfacen", dijo Gibson el sábado frente a 3 mil 800 invitados en la Azusa Pacific University, una universidad evangélica.
-El suceso, transmitido a iglesias de todo Estados Unidos, fue presentado como un "mitin de entrenamiento" para pastores y líderes de grupos religiosos juveniles que podrían utilizar esta representación de los sufrimientos de Cristo para atraer a nuevos creyentes.
-Algunos dirigentes de la comunidad judía han expresado temor de que la película sobre la crucifixión despierte sentimientos antisemitas. "Yo no soy antisemita", dijo Gibson, que dirigió, coescribió e invirtió 25 millones de dólares en la película. "La he mostrado a muchos judíos, que me han dicho que no es antisemita?.
-Gibson prevé estrenar la película en Estados Unidos el 25 de febrero, Miércoles de Ceniza en el calendario católico.
FUENTE: EFE