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WASHINGTON, EU.- México fue ubicado en una posición intermedia en la clasificación del Banco Mundial sobre las facilidades que otorga a la apertura de negocios, la atracción de inversiones y la solución de litigios comerciales.
El reporte "Haciendo Negocios 2005: Eliminando obstáculos para el crecimiento" muestra a México rezagado en relación con países como Chile, pero adelantado sobre países como Brasil, en el índice general de parámetros de facilidades, sin embargo, reconoció que los países latinoamericanos en general tienen desventajas para atraer inversiones.
"México está desarrollándose razonablemente bien, pero aún le falta mucho camino por recorrer", dijo la coautora del estudio y vicepresidenta para desarrollo de la Corporación Financiera Internacional (IFC) del Banco Mundial, Caralee McLeish.
En México se demora, por ejemplo, 58 días para la apertura de un negocio, comparado con sólo 28 días en Chile, 32 en Argentina, 152 en Brasil y 203 en Haití, mientras que en países como Australia el trámite lleva dos días.
El costo inicial de la apertura de un negocio es de 16.7 por ciento en México, comparado con 1.0 por ciento en Puerto Rico, diez por ciento del total en Chile, 11.7 por ciento en Brasil y 176 por ciento en Haití. En Dinamarca la apertura es gratuita.
La duración para registrar una propiedad es de 74 días en México, comparado con 31 días en Chile y 42 en Brasil. Ecuador registra el menor tiempo de América Latina con 21 días y, a nivel mundial, en Noruega puede hacerse el mismo día.
El costo del registro de propiedad es de 5.3 por ciento en México comparado con 1.4 por ciento en Chile y dos por ciento en Brasil. El país de la región más caro es Puerto Rico, con 16 por ciento, mientras que en Arabia Saudita no se cobre ese servicio.
McLeish destacó que, al igual que en otros países de la región, en México no se registraron cambios significativos durante el último año en las facilidades para los negocios, aunque reformas previas como la nueva ley de bancarrotas, han tenido efectos positivos.
"México tiene un desempeño en el 40 por ciento más alto (de los 145 países examinados). Está en el promedio, pero entre los mejores", apuntó.
En el reporte, México aparece en el grupo de diez países del mundo donde es más difícil despedir trabajadores, junto a Camerún, Egipto, Ucrania, Congo, India, Nepal, Angola, Túnez y Uzbekistán. Un trabajador mexicano despedido cuesta en promedio 83 semanas de paga.
McLeish señaló que se trata de un área importante, porque dificulta que las empresas contraten trabajadores, o lo hagan de manera informal, sin pagarles beneficios. "Puede haber buenas intenciones, pero son medidas que tienden a ser contraproducentes", dijo.
La economista comentó que en muchos países existe oposición a reformas laborales o legales porque se desconocen sus beneficios.
Estimó que el Producto Interno Bruto (PIB) mexicano podría aumentar medio punto porcentual con las reformas, sin embargo hizo notar que no ha sido el caso de muchas naciones.
De los 58 países que reformaron sus regulaciones a la actividad empresarial o reforzaron la protección de los derechos de propiedad en el último año sólo seis se encuentran en Latinoamérica: Colombia, Nicaragua, Argentina, Honduras, Bolivia y Brasil.
