SANTO DOMINGO, REP. DOMINICANA.- Tras perder en la jornada inaugural de la Serie del Caribe, los Tomateros de México sabían que no podían darse el lujo de caer en un hoyo perdiendo el segundo encuentro.
Los jugadores mexicanos respondieron al reto, venciendo a los Tigres de Venezuela 4-3 detrás del bate del panameño José Macías y el brazo de Elmer Dessens y su cuerpo de relevistas.
México perdió el domingo 6-5 frente a los favoritos Tigres de República Dominicana en la apertura del clásico caribeño.
"El primer día fue un poquito diferente. Pudimos haber ganado pero aceptamos que se perdió", comentó el manager mexicano, Francisco Estrada. "Son seis días muy intensos, muy difíciles y no podemos caer atrás", agregó.
Estrada destacó el trabajo de Dessens y sus relevistas Mark Kroon y Luis Ignacio Ayala, quienes aguantaron un empuje venezolano de tres carreras en la séptima y octava entrada.
Sostuvo que la experiencia de su cuerpo monticular hace más cómodo jugar con ventaja, como sucedió frente a Venezuela.
"Cuando estás arriba para el séptimo, octavo y noveno, tengo buenos relevos, de experiencia. Tengo confianza en ellos", afirmó.
Sostuvo que espera que su abridor de hoy frente a los Leones de Puerto Rico, Rodrigo López, dure cinco o seis entradas para luego entregar el partido a sus relevistas.
Ayala, por su parte, indicó que los Tomateros demostraron que pueden competir de tú a tú con cualquier novena en la serie, pudiendo controlar los bates de poderosos toleteros venezolanos como Miguel Cabrera, de los Marlines de Florida de grandes ligas, quien se fue en blanco en cuatro turnos.
Sin embargo, el estelar Magglio Ordóñez, de los Medias Blancas de Chicago, detonó con un partido de 4-3, con un monumental jonrón por el jardín izquierdo.
"México tiene para ganar cualquier partido. Hay que tomarlo juego por juego", expresó.