El Siglo de Torreón
CARSON, EU.- En partido ríspido y de mal arbitraje, México y Chile empataron anoche a un gol, ante 20 mil aficionados reunidos en el Estadio Home Depot.
Un primer tiempo en el que México fue superior, pero el conjunto andino aprovechó, por conducto de Reinaldo Navia, en el minuto 45 con 23 segundos de la primera parte, la única oportunidad de gol que se le presentó para anotar el gol de la quiniela e irse con la mínima ventaja al descanso.
México tuvo su mejor llegada con Adolfo Bautista, pero el “Bofo” no pudo controlar un gran servicio de Octavio Valdez. Luis Ernesto Pérez se convirtió en el mejor hombre del Tri, pero el dominio ejercido en el terreno no se vio cristalizado.
Para la segunda mitad, el técnico chileno, Juvenal Olmos, realiza tres cambios que le dan otra fisonomía al conjunto sudamericano; Mauricio Pinilla, Mario González y Jorge Valdivia encabezan la ofensiva andina, en donde Reinaldo Navia se mantiene con un futbol marrullero, entradas de mala intención y reclamos constantes al árbitro central, Alex Cruz.
Apenas se jugaban cuatro minutos de la segunda mitad, cuando Omar Bravo aprovechó una buena jugada de Octavio Valdez por el costado izquierdo, el jugador de Pachuca envió el balón al centro y el defensa chileno, Rodrigo Pérez, llega tarde, Omar Bravo controla y de pierna derecha fusila a Nelson Tapia, en el empate a uno.
Moisés Villarreal toma el sitio de Ricardo Rojas y Ricardo La Volpe responde con el ingreso de Fernando Arce por Rafael García, en momentos en que Chile había tomado el control del partido. Los andinos no podían concretar ese dominio y de nueva cuenta regresaron las entradas fuertes y de mala intención, ante la complacencia del silbante, que puso muy caras las tarjetas.
México jugó con Mario Pérez y Diego Martínez por los costados, como lo hicieron en el reciente Torneo Preolímpico; la novedad en el ataque fue Octavio Mora, con un nivel muy por debajo de lo que acostumbra ofrecer en el Veracruz. Chile tampoco ofreció cosas importantes en la segunda parte y a partir del gol de Omar Bravo, las acciones decayeron, como si ambos equipos se conformaran con el empate.
Y es precisamente con Emilio Mora como llega una buena oportunidad para México a tres minutos del final. En las últimas acciones del partido, Mauricio Pinilla y Omar Briseño fueron protagonistas de una gresca que a punto estuvo de generalizarse, pero algunos elementos conciliaron para dar paso así a la última acción, una anotación de Reinaldo Navia, anulada por claro fuera de lugar del atacante de las Águilas del América.