HISTORIAS DE LA CREACIÓN DEL MUNDO
Es cierto: el Señor maldijo a la mujer por haber comido del fruto prohibido.
La condenó a sufrir penalidades en su preñez.
La condenó a dar a luz con dolor.
La condenó a estar atada por su deseo al hombre.
La condenó a sufrir el señorío del varón.
Pero en ninguna parte del Génesis se lee que el Señor la haya condenado también a hacer comida los domingos.
Todos los domingos Adán y Eva deben comer fuera.
¡Hasta mañana!...